Escala Crítica/Columna diaria
*Viernes Negro a “Buen Fin”, recuperar el mercado
*A mediano plazo, el empleo y el poder adquisitivo
*Inundaciones, el impacto a las pequeñas empresas
Víctor M. Sámano Labastida
MÁS DE DOS millones de burócratas federales recibirán un adelanto de sus aguinaldos en la primera quincena de noviembre. El objetivo, anunció el presidente Felipe Calderón, es reactivar el mercado interno. Será “el fin de semana más barato del año”, dijo en referencia a que para gastar esta parte de su aguinaldo, los empleados federales encontrarán una serie de ofertas en todo el país. El acuerdo entre empresarios y gobierno pretende aplicar en México un mecanismo de gran éxito en Estados Unidos: el “Black Friday”, o viernes negro. Aquí se denominará “Buen Fin”.
De hecho, en Estados Unidos, el “Black Friday” da inicio a la temporada de compras navideñas. En México, por el momento, sólo participan de esta especie de gran venta nocturna –que abarcará los días 18 al 21 de noviembre-, los empleados federales cuyo aguinaldo es de 40 días al año, peri que esta vez será repartido en tres entregas: una antes del 18 de noviembre, otra en diciembre y la tercera en enero “para poder compensar el efecto” de los gastos navideños.
El buen fin es, sin duda meritorio: recuperar el mercado interno. Pero el sólo consumo podría representar un incentivo efímero si no es acompañado de una política de mediano y largo plazo para reactivar el empleo y mejorar el poder adquisitivo.
Bien recordaba Enrique Galván (La Jornada, 10/XI/2011) aquel refrán japonés que advierte: “dinero ahorrado se gana dos veces”. Mencionó el columnista que 15 millones de trabajadores están afiliados al IMSS, mientras que el 29% de la Población Económicamente Activa se ubica en la economía informal. Por su parte Carlos Mota (Milenio, 10/XI/2011), tras destacar los méritos del aguinaldazo a los burócratas federales reflexiona: “lo que también puede ser cierto es que en enero se requerirá otra iniciativa para sumar esfuerzos con otro gremio, los psicólogos. Serán indispensables para sanar las culpas”. Quizá de un consumo excesivo, en lugar de un consumo productivo.
En Tabasco, desde hace varios meses comentan en círculos empresariales la necesidad de fomentar el consumo de productos locales. También se requiere recuperar la producción local.
A nivel nacional, a principios del 2000 –ha transcurrido más de una década-, consultores de finanzas como los de Bursamétrica, planteaban la urgencia de recuperar el mercado interno. Pablo Álvarez, analista de la firma, decía que “si no logramos que el mercado interno se recupere, este país no tiene ningún remedio y vamos al caos social”. De entonces para acá, la palabra crisis económica se volvió cada vez más frecuente.
El dilema: una recuperación momentánea y para un sector, o una recuperación lenta pero constante y sostenida. En fin, son cosas de especialistas pero que pegan directamente al bolsillo y al estómago.
MICROEMPRESAS, MACRODAÑO
INTERESANTES y reveladoras cifras de la Coparmex Tabasco sobre los efectos en el sector por las cinco inundaciones consecutivas; aunque aún está en proceso la evaluación del impacto de este año. El segmento de los empresarios más perjudicado es el de los micro inversionistas, pero la ola expansiva toca a toda la economía. No olvidemos que la base de la economía local y nacional son las pequeñas empresas familiares.
Según la evaluación del sector patronal tabasqueño, en el 2007, resultaron con daños 24 mil 885 unidades económicas; 63% del sector comercio, 32% en servicios y el 5% en el rubro de la industria. Pero el 95% de afectaciones fue en las microempresas.
En el 2008, 2009 y 2010, siempre conforme a la Coparmex, fueron afectadas 7 mil 166 unidades; 71.38% del comercio, 20.58% de servicios y 8.04% en la industria. Otra vez, el mayor impacto fue para el sector industrial; 99.30 por ciento fueron microempresas. Esto muestra, señala el reporte del organismo patronal, la alta vulnerabilidad para los microinversionistas. Aunque en términos financieros las microempresas pudieran representar un valor menor en comparación a las unidades corporativas, son fundamentales por su importancia social.
Las microempresas son las principales empleadoras y su funcionamiento garantiza, además, la reproducción sustentable de la economía local.
Los inversionistas tabasqueños arrancaron hace dos años, como respuesta a las inundaciones catastróficas, un proyecto denominado “Cambio de cultura empresarial ante los efectos del cambio climático”. Bien, aunque hace falta un enfoque de mayor alcance, porque no es sólo el cambio climático el que coloca en situación de crisis a los sectores productivos; son también afectados por la dinámica que algunos especialistas denominan “extractora” o “depredadora” de la riqueza generada localmente.
Como lo recordó Luis Álvarez, de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), las inundaciones de Tabasco en el 2007 están catalogadas como el quinto evento más costoso para las aseguradoras en México. Pagaron 379 millones de dólares, a pesar de que en la entidad existe una muy limitada cultura de la prevención y aseguramiento de bienes.
AL MARGEN
EL CEN del PRI está dispuesto a mantener la ofensiva en materia legal ante los amagos de Los Pinos contra su dirigente Humberto Moreira. Después de la denuncia por los dichos de Calderón a The New York Times sobre los “pactos con narcos”, ahora lo acusan de violar la ley electoral por el Royal Tour...ACEPTÓ la dirigencia del PRD que todos los candidatos a diputados y senadores de la alianza de “las izquierdas” surjan de encuestas, aún a riesgo de que los mejor ubicados sean del PT o ex Convergencia…HOY, a las 18:00 horas en la Feria del Libro de la UJAT, homenaje a Miguel Ángel Granados Chapa. (
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