Escala Crítica/Columna Diaria
*No hubo regaño, pero sí recomendaciones, en reunión con AMLO
*Diputados y senadores no se dan por aludidos en crítica presidencial
*Burelo y Alamina, levantan la mano por dirigencia estatal de Morena
Víctor M. Sámano Labastida
EN NINGUNA parte del mundo un partido dividido puede ser opción de gobierno, esto es una obviedad pero a veces es necesario repetirla. Así lo hizo ante diputados y senadores de Morena la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, al inaugurar una reunión plenaria de diputados del movimiento lopezobradorista. En ese mismo contexto, el presidente López Obrador se reunió con las bancadas de su movimiento. Tiene razón Doña Olga. Pero no sólo resulta ineficaz un partido dividido.
También la existencia de una mayoría dispersa y confrontada no puede impulsar el andamiaje jurídico que precisa un régimen; mucho menos cuando se ha propuesto un cambio de modelo, como lo ha advertido -entre otros- Porfirio Muñoz Ledo, viejo lobo del mar de la política mexicana.
Puede haber una “sana distancia”, o una “sana cercanía” entre partido y gobierno, pero tampoco se puede concebir –en sistema como el mexicano- gobiernos sin partido.
CONTRA EL TIEMPO
EN 1997 tuvimos el primer gobierno sin mayoría legislativa, lo que obligó al partido que despachaba en la Presidencia a realizar una intensa labor de negociación en sus iniciativas. Esto lo llevó asimismo a construir una alianza con el PAN, lo que le permitió saltar a la jefatura del Ejecutivo Federal en medio de la crisis provocada por una fuerte coalición de izquierda.
Es hasta las votaciones del 2018 cuando Morena logra una hegemonía abrumadora ampliada por la suma de aliados en los partidos Encuentro Social y del Trabajo…sólo que Morena todavía no es -en los hechos- un partido, aunque tiene el reconocimiento formal. Esto de que no sea todavía un partido lo han expresado sus propios integrantes, no es juicio del columnista.
En estos días, Morena enfrenta el reto de mantener la unidad y construirse como un partido, tiene que “institucionalizarse”, como alguna vez lo planteó Bertha Luján, presidente del Consejo Político. Y el tema de la unidad fue uno de los que López Obrador trató ayer en la reunión privada que tuvo con senadores y diputados.
En la plenaria de los legisladores, la titular de Segob expuso: “Debemos recordar que en ninguna parte del mundo un partido dividido puede ser una opción de gobierno. Hacernos responsables de nuestras acciones es un acto de valentía y por eso debemos mantener la unidad, porque solo de esa manera podemos seguir transformando a nuestro querido México”.
López Obrador dialogó con los diputados y senadores sobre la agenda del próximo periodo de sesiones. Había anunciado que entregaría una carta como militante morenista, para exponer sus reflexiones frente a la etapa que viven tanto las bancadas como el proceso para elegir dirigentes nacional y estatales.
Ha insistido en la necesidad de alejarse de la “politiquería y del circo”. Quienes participaron en la reunión de poco más de dos horas que AMLO tuvo con diputados y senadores, coincidieron en que la preocupación del mandatario es la agenda legislativa pendiente, en particular la propuesta del Paquete Económico 2020 será enviado el 8 de septiembre, para “consolidar la política de austeridad”.
En la agenda lopezobradorista siguen la creación del Instituto de Salud para el Bienestar; una ley de amnistía; un menor financiamiento a los partidos políticos, la ley de austeridad, la reforma constitucional en materia de fuero, así como la protección a defensores de derechos humanos y periodistas, entre otros asuntos.
La sombra que buscan despejar es la lucha por el control de las bancadas, como sucedió entre Ricardo Monreal y Martí Batres en el Senado.
LA SILLA DEL ÁGUILA
SON CUATRO los aspirantes visibles para la dirigencia nacional de Morena: Bertha Luján, actual presidente del Consejo Político; Yeidckol Polevnsky, secretaria general en funciones de dirigente; Mario Delgado, diputado federal, y Alejandro Rojas, senador suplente. En Tabasco, dos son los nombres que han trascendido hasta ahora para encabezar al partido lopezobradorista en los próximos años y para la contienda electoral del 2021: César Francisco Burelo, actual delegado en funciones de presidente; y Gabriel Alamina Rodríguez, actual secretario técnico de la Comisión de Medio Ambiente en el Congreso local.
Seguramente se anotarán otros más. Quien se descartó para ese cargo es el actual secretario estatal del Bienestar, Mario Llergo. Por lo menos a nivel nacional esta cuestión se resolverá con una encuesta, ante el riesgo de la división.
Mientras, el diputado Rafael Elías Sánchez Cabrales descarta que en la entidad haya conflictos por la Mesa Directiva del Congreso. Aunque asegura que ya tiene el consenso de la fracción de Morena para relevar a Tomás Brito, no le preocupa un cambio de última hora. “Nos disciplinamos”, afirma. La decisión formal se conocerá el 4 de septiembre; pero es un hecho que el bloque mayoritario seguirá despechando en el cargo. De los 35 legisladores, los morenistas suman 21. El jonuteco ha sido ya diputado federal, estatal y presidente municipal.
Uno de los temas que mayor polémica ha despertado –y eso ocurre año con año-, es el de la revisión y calificación de las cuentas públicas, que en ese caso corresponden al último año de la administración de Arturo Núñez y de los gobiernos municipales. Los propios diputados se han quejado de las limitaciones legales y técnicas para realizar un análisis exhaustivo. (
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