Escala Crítica/Columna diaria
*Las circunstancias y López Obrador; acelerar la transformación
*Pide López Gatell: eviten llevar el virus a poblaciones rurales
*González Pedrero y sus 90 años: la vida como realización
Víctor M. Sámano Labastida
COMO era de esperarse el Plan del presidente López Obrador para reactivar la economía –diría que más bien para buscar estabilizarla- ante la crisis sanitaria por el coronavirus desató una intensa polémica. Hay quienes vieron en esta crisis la oportunidad para cambiar las intenciones del mandatario –esto es, regresar al antiguo esquema o por lo menos frenar las actuales políticas-, en tanto que otros asumieron la oportunidad de profundizar y acelerar la denominada Cuarta Transformación.
También hay quienes miran esta circunstancia para ajustar las medidas y acciones, sin abandonar el objetivo de la justicia social y el combate a la desigualdad. Mucha agua correrá bajo esos puentes.
El propio AMLO definió claramente el curso de su mandato: no hay marcha atrás en las acciones de política y economía establecidas durante su toma de protesta.
INGENUIDAD Y POLÍTICA
LÓPEZ Obrador planteó, desde un principio, que proponía un modelo distinto que primero se conoció como post neoliberal y posteriormente calificó de economía del bienestar y luego economía moral.
Sería ingenuo pensar que un político como AMLO no aprovecharía la circunstancia para acelerar el proceso de desmantelamiento del viejo régimen esquema. Como también que sus adversarios tomarían la ocasión para frenar modificaciones que afectan sus intereses.
Sus críticos sostienen que nada nuevo propone López Obrador frente a la actual crisis; quienes lo defienden subrayan que lo nuevo fue anunciado desde que asumió el poder. ¿Cuáles son los costos y cuáles los resultados?, estamos en un proceso en el que un elemento imprevisto –la pandemia-, obligará a revisar todos los supuestos.
Existe un cierto consenso mundial en que la pandemia marca el fin de una etapa en el periodo globalizador neoliberal. Hay quienes señalan el ocaso del capitalismo, otros no se atreven a ir tan lejos y sólo refieren que estamos viviendo el término de la era salvaje de este modelo. AMLO insiste en que se están dando las condiciones para otro camino de desarrollo que ha denominado también “la vía mexicana”.
Para países como México, una tarea fundamental es atender a esa franja mayoritaria de la población que se ubica en la extrema y media pobreza; no sólo porque ha carecido de ingresos suficientes para su consumo diario, sino porque también no cuenta con acceso a sistemas de salud eficientes.
No resulta casual el llamado del subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, para que la gente de las ciudades evite movilizarse a las zonas rurales y periféricas, porque precisamente son las más vulnerables si el virus sigue circulando. Dijo el jefe de la estrategia contra la pandemia: “No viajen porque si viajan lo que ocurrirá es que se dispersará más a las comunidades y se acercará a las comunidades socialmente más vulnerables”.
Es lo que un entrevistado de Presente, el médico veterinario Miguel Garibay, ha mencionado como necesarias medidas de bioseguridad que debieron tomarse en la entrada al país pero que ahora aplican –a su real saber y entender- algunas poblaciones alejadas del centro del país.
HABLAR, ESCUCHAR, CALLAR
AYER cumplió 90 años de edad Enrique González Pedrero, ex gobernador de Tabasco. Las circunstancias de sana distancia por la pandemia no fue obstáculo para que sus amigos y conocidos le expresaran afecto y reconocimiento. En una entrevista reciente comentó que actualmente se dedica a escribir sus “recuerdos”. En cierta ocasión, con su conocido buen humor, nos refería que cuando una amiga le preguntó que hacía y él respondió que sus memorias, la interlocutora le acotó: “Enrique, memorias las de Churchill o De Gaulle, lo tuyo son recuerdos”. Y reía por la ocurrencia.
Le dijo recientemente a Virginia Bautista (Excelsior): “cuando uno es joven la vida es un proyecto, cuando se llega a la madurez la vida es la realización del proyecto y en la vejez llega la etapa de observar y callar”.
En una de tantas conversaciones tenidas con el ex mandatario durante sus periódicas visitas a Tabasco y ante la insistencia para que respondiera a preguntas que consideraba inoportunas expresaba: de niño uno hace el esfuerzo por aprender a hablar, después uno debe aprender a escuchar y ya mayor tiene que saber callar.
Terminada su extensa obra de investigación “País de un solo hombre: el México de Santa Anna”, a la que dedicó más de 25 años y cuyos tres tomos se publicaron en 1993, 2003 y 2017, González Pedrero pasa su tiempo entre la lectura y el silencio reflexivo. Siempre –decía- tiene una añoranza a Tabasco, su estado natal que visitaba para abrazarse a una ceiba, ritual que mantuvo, lo mismo que las tertulias con sus amigos.
Hace diez años, en ocasión de una larga entrevista que fue publicada en cinco partes en Presente -“ya tiene usted para escribir un libro”, me dijo-, expresó que la crisis también abre horizontes si se sabe comprender y aprovechar. Así, contó que precisamente su vocación política “viene, probablemente, como una forma de enfrentar las situaciones adversas”.
Y recordó: “Fue lo que mi padre y mi madre enfrentaron cuando tuvieron que salir de Tabasco. Es la parte negativa, digamos; pero la parte positiva fue el mundo que se abrió, quizá de otra manera quién sabe cómo hubieran sido mi vida, la de mis hermanos y la de la propia familia”. La crisis y la vida como oportunidades.
AL MARGEN
ENTRE los varios homenajes previstos en los 90 años de González Pedrero, uno que tuvo que ajustarse en fechas y organización es el de la presentación de la serie “Ensayos”, que publicará la Secretaría de Cultura de Tabasco y colección que llevará por nombre el del ex gobernador. (
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