Escala Crítica/Columna diaria
*Todavía tenemos procesos electorales costosos, pero más certeza
*Los tabasqueños, entre los que más votan; Jonuta, a la cabeza
*Sámano-Vargas, videoartista en un festival de Viena, Austria
Víctor M. Sámano Labastida
EN MÉXICO, a partir del 2007 se inició un plan para la homologación de las elecciones. Se dijo que de esta manera evitarían la dispersión de los procesos electorales, bajarían costos y el país estaría menos tiempo metido en la competencia por los votos. Todavía un estudio de 2011 colocó a nuestro país en el rango de las democracias que más recursos financieros requerían: dos veces más que España, tres veces más que Brasil y cuatro veces más que Colombia. Sólo por citar algunos casos.
En Tabasco, fue a partir del 2012, luego de una reforma del año anterior, cuando las elecciones federales, estatales y municipales se realizaron en la misma fecha. Antes había unos tres o cuatro meses de distancia entre una jornada de votaciones y otra. Así sucedió, con elecciones en la misma fecha, en 2015, 2018, ahora en 2021 y así será en 2024.
En otros tiempos, la realización de los procesos electorales federal y estatal en fechas distintas permitía a los partidos “negociar” posiciones al interior de cada instituto.
COMPACTAR CALENDARIOS
SE HA DICHO que las de este año son las elecciones más grandes de la historia en el país. En efecto, es la primera vez que se realizan en un mismo día también las votaciones para las gubernaturas en 15 estados y para presidentes municipales en casi 2000 localidades. En total son unos 20 mil cargos que deberán definirse.
En 2018, cuando se realizaron las elecciones presidenciales y también se dijo que eran las más grandes –hasta esa fecha-, en total se decidieron 3 mil 400 cargos. Hubo, al igual que ahora, votaciones para 30 de los 32 congresos locales, pero sólo nueve elecciones para gobernadores y menos presidencias municipales que ahora.
En Tabasco hay una padrón de ciudadanos de 1 millón 752 mil 744 electores de la entidad; en 2018 fue de 1 millón 688 mil 947.
Según las autoridades electorales, los tabasqueños son los que más votan en el país. Por lo menos en el 2018, que además tenían el atractivo del paisanaje en la disputa por la Presidencia, acudieron a las urnas el 70 por ciento de los empadronados en promedio. Como siempre, la mayor participación se dio en uno de los municipios más pequeños del estado, el de Jonuta: casi 85 por ciento. Un récord. Me parece que no hay ningún municipio en el país que supere ese porcentaje.
Por el contrario, en el municipio de Centro es donde los ciudadanos se resisten más a acudir a las urnas, hay más abstencionismo. En 2018 mientras el promedio estatal de votación como le decía fue del 70 por ciento, en la capital del estado fue de 67 por ciento, aunque esa vez en las municipales Macuspana registró 65 por ciento de participación; el más bajo del estado.
ALTAS Y BAJAS DE VOTANTES
EN 2015, se confirmó la tendencia a la menor votación en elecciones intermedias. Aquel año, la respuesta de los electores cayó en diez puntos: fue a las urnas el 56 por ciento, un abstencionismo de 44 puntos.
Podemos mencionar que en las elecciones del 2006 también hubo un motivo especial de interés para los votantes tabasqueños. Como ustedes recordarán en aquella ocasión dos tabasqueños fueron candidatos a la Presidencia: Roberto Madrazo Pintado y Andrés Manuel López Obrador. El promedio de votación fue del 63 por ciento con un abstencionismo del 37 por ciento.
Se dice que Tabasco tiene la población más interesada en la política de todo el país. Quizá esto se debe a que han existido líderes como Tomás Garrido Canabal y Carlos Madrazo Becerra, cuya actividad tuvo impacto nacional.
Es interesante observar la importancia que Tabasco adquirió en este siglo. A pesar de que su población es apenas del dos por ciento aproximado del total nacional y que en la Cámara de Diputados sólo hay seis legisladores de mayoría entre los 300 que ahí despachan. Uno de los factores sin duda ha sido el petróleo desde la segunda mitad del siglo pasado, pero otro es la política. Ahora con más razón a partir de lo que López Obrador denominó la “tabasqueñización”, aunque también podemos citar una mayor visibilidad de todo el sureste mexicano.
Tenemos este día tres tipos de elecciones: la federal de diputados, las municipales de alcaldes y la distrital de diputados locales.
Son seis diputaciones federales y cada uno representa a unos 300 mil electores. En el caso de los diputados locales, hasta antes de la reforma electoral que estableció la representación por número de pobladores, había prácticamente un diputado por cada municipio. Así podíamos hablar de un diputado por Jonuta, otro por Zapata o Tenosique. Sin embargo se decidió que cada diputado representara más o menos a unos cien mil habitantes, de manera que hay municipios pequeños que comparten legisladores.
AL MARGEN
UNA OBRA de Misael Sámano Vargas fue presentada recientemente como parte de la exposición de videoarte 'Slow Wave', en la Galería IntAkt del Centro Cultural WUK, en Viena, Austria. La pieza 'Parece que todos estamos pensando lo mismo', forma parte del proyecto colaborativo de videoarte 'Beyond', realizado entre Rosario Aróstegui, Mariela Limerutti y Sámano Vargas. En 2018 ganó en la categoría de videoarte por ‘Esto no es un ensayo’, que hizo en colaboración de Marco Toledo, un compañero del master que estudió en Valencia, España. Esta distinción fue en la Bienal Internacional de Arte Contemporáneo Emergente Eve-Maria Zimmermann (BACOS) San Miguel, Tenerife, Canarias, España; un logro del colectivo Fulmen. Felicitaciones.
