Factor Los Pinos, en la contienda por la gubernatura de Tabasco y otros

Lunes, 11 de Junio de 2018 12:17 Editor
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 Escala Crítica/Columna diaria

*Los aspirantes locales muy atentos al tercer y último debate
*Adán, Cantón y Alí le apuestan a AMLO por razones diversas
*Gina busca rescate de Meade y Gaudiano salvar el escollo Anaya
 
Víctor M. Sámano Labastida
 
TIENEN razón lo que apuntan quienes siguieron el debate organizado por el IEPCT con los aspirantes al gobierno de Tabasco –una mujer y cinco hombres-: si colocáramos todas las propuestas en un solo paquete, excluyendo aquellas que son contrarias a una visión integral del desarrollo, esta entidad del sureste contaría con el mejor proyecto para las próximas décadas, no sólo para un sexenio. Pero también se afirma que los políticos proponen y la realidad dispone.
Nuevamente, como el primer encuentro de la candidata y los candidatos, un factor gravitó sobre lo que puede ser para Tabasco a partir del primero de enero del 2019: la posibilidad de que Andrés Manuel López Obrador sea Presidente de la República. Tres de los aspirantes no dudaron en cifrar sus esperanzas y proyectos en esa condición.
Mañana es el tercer y último debate de los tres aspirantes a la Presidencia; el cuarto, independiente, carece de toda posibilidad. Seguramente los seis que en Tabasco aparecerán en las boletas para la gubernatura estarán pendientes de cómo arrancarán en esta etapa final López Obrador, Ricardo Anaya y José Antonio Meade. No es para menos.
 
OPRTUNISMO Y OPORTUNIDAD
LE DECÍA líneas arriba que por lo menos tres de los candidatos a la gubernatura tabasqueña se refirieron a su certidumbre de un próximo “presidente de la República tabasqueño”.
Así lo afirmó -por supuesto- Adán Augusto López Hernández (Morena-PT-PES), quien ahora con más insistencia remarcó la fórmula AMLO-Adán, como parte de la estrategia de su campaña. También lo hicieron Oscar Cantón Zetina (PVEM), quien después del debate pasado fue reconvenido por la dirigencia nacional del partido que lo postula y que a nivel nacional va con Meade Kuribreña; lo mismo Jesús Alí de la Torre (independiente), quien va por la libre y buscará mantenerse vigente para futuras elecciones.
Manuel Paz Ojeda (Panal) no se refirió al tema en el debate, pero ha expresado en otra ocasión que habrá “voto cruzado” en Tabasco, ya que según dijo en una entrevista “ocho de cada diez” afirman que van a votar por AMLO, pero que en lo local seleccionarán otras opciones, particularmente “la ciudadana” que él representaría y no “los mismos de siempre”. Aunque Nueva Alianza va en coalición con el tricolor a nivel federal, en lo estatal tiene sus propios candidatos. Paz Ojeda tiene su propia agenda.
Caso distinto es el de Georgina Trujillo (PRI), quien está empeñada en obtener el máximo de votos para el candidato de su partido a la Presidencia, José Antonio Meade. Para ella el objetivo es claro: reagrupar y reanimar al voto duro del PRI que la catapulte a la gubernatura y evitar que López Obrador obtenga el millón de sufragios en Tabasco. 
Gerardo Gaudiano Rovirosa ha señalado que votará por los candidatos de su partido, lo que incluye a Ricardo Anaya como abanderado del PRD dentro de la coalición con el PAN y MC. Aunque también sostiene que “no tendrá ningún problema” con un Presidente que no sea el de su coalición. El equipo del solaztequista ha insistido en que estamos ante una elección de personas y no de marcas. En el más reciente debate Gaudiano afirmó que la de julio para gobernador es una competencia entre dos opciones: la que representa Adán Augusto y la que representa él como “una generación joven”. Es una elección de dos, insiste.
 
LOS PINOS Y LA QUINTA
NO ES CASUAL que ahora la contienda por la Presidencia tenga tanta importancia al considerar los posibles resultados. Más allá del posible “voto cruzado” o “voto razonado”, que impulsan quienes buscan acotar el “Efecto AMLO”, la votación federal determinará quiénes entrarán al senado por la vía de mayoría y primera minoría. Si Mónica Fernández y Javier May (Morena), Juan Manuel Fócil y Ana Bertha Vidal (PRD), o Candita Gil Jiménez y Manuel Andrade (PRI). Como se sabe, el partido o coalición que ocupe el primer lugar en el conteo federal en Tabasco colocará a sus dos abanderados y el que quede en segundo sólo a uno de sus candidatos. 
En las diputaciones federales son seis posiciones de mayoría y una lista de plurinominales para la tercera circunscripción en la que compartirán posiciones los estados de Campeche, Chiapas, Oaxaca, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz y Yucatán.   
El “factor presidencial” o el “efecto de Los Pinos” han cambiado por diversas circunstancias, siendo las más notorias una mayor competencia entre los partidos y la reforma en las fechas de la elección. Una reforma además obligada por mandato constitucional. 
Posiblemente algunos lectores recuerden que aunque las votaciones estatales tabasqueñas coincidían en año con las votaciones federales, mientras éstas se realizaban en julio las otras ocurrían ya sea en noviembre o en octubre. De esta manera, cuando transcurría el proceso local ya se conocía el nombre de quien había ganado la Presidencia. En tiempos de hegemonía del PRI el nombre del candidato –y seguro gobernador- dependía de las decisiones del Presidente electo, o casi electo.
Esto cambió, como le comentaba, primero con la competencia y en especial con la alternancia del año 2000, pero fue definitiva la homologación de fechas ocurrida por primera vez en 2012, cuando los comicios locales se realizaron el mismo día que los nacionales. A tal grado fue el impacto que incluso para el PRI no sólo significó una derrota estatal sino que su candidato a la Presidencia (Peña Nieto), obtuvo menos votos que su abanderado a la gubernatura (Jesús Alí).
AL MARGEN
El Factor Presidencial de la competencia, pero ahora en sentido distinto, es determinante para la y los aspirantes tabasqueños. ( Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla )