*Cinco funcionarios federales aspiran a dirigir al tricolor  

*Calderón, las pensiones presidenciales y empleo privado

*Villahermosa, una ciudad en territorio minado; urge cirugía

 

Víctor M. Sámano Labastida

ESTÁ EN PUERTA un cambio de delegados federales en Tabasco. Algo que también sucederá en varios estados. Aunque la decisión se ha venido postergando, el relevo en la dirigencia nacional del PRI con la llegada de Enrique Ochoa Reza y la revisión de los resultados de la gestión de Enrique Peña Nieto, así como su impacto en la opinión pública, obliga a remover varias piezas. Los resultados de las elecciones de junio pasado motivaron varios encuentros en el gabinete de Los Pinos. No es casual el reciente anuncio de un “nuevo modelo educativo” y esa especie de tregua buscada por Aurelio Nuño.

En el caso de Tabasco, a la decisión presidencial de cambios en sus representantes se agrega la promoción o autopromoción de varios actuales funcionarios que aspiran a encabezar el PRI estatal. Públicamente se mencionan como pretendientes para el cargo que ocupa Miguel Ángel Valdivia los delegados Carlos Hernández Reyes, de Sagarpa; Máximo Moscoso, de la Profeco; Nicolás Bellizia, del Infonavit, y Hernán Barueta. En su momento también se mencionó con aspiraciones al delegado de la Conafor, Francisco Lastra Bastar. 

No es seguro que alguno de ellos vaya a la dirigencia del tricolor estatal, pero es un hecho que habrá cambios. Una de las preocupaciones en el centro del país es la falta de coordinación entre estos funcionarios, aunque tienen reuniones periódicas.

Un reporte de Enriqueta Ochoa para el diario  El Financiero señala que el nuevo dirigente nacional del PRI, Ochoa Reza se reunió con unos 60 ex legisladores del tricolor quienes entregaron un documento y se quejaron de la “desarticulación entre partido y gobierno”, pero además insistieron en que la mayoría de los delegados federales estaban más preocupados por sus “proyectos personales” que por la función pública.

Claro que lo que está en el fondo es un adelanto de la batalla por las candidaturas para el 2018, porque para el año próximo solo quedan tres elecciones estatales. Quienes tienen cargos públicos cuentan con ventaja y la posibilidad de la reelección cierra las oportunidades a quienes están en la banca.

 

HOYOS DE NUNCA ACABAR

LA CIUDAD de Villahermosa necesita lo que podríamos llamar una cirugía mayor en planeación urbana, revisión y reparación de infraestructura y reorganización social. La urbe capitalina no sólo ya le queda chica a los más de 500 mil habitantes, sino que está quedando obsoleta. Los reportes sobre la percepción de inseguridad o el “mal humor social”, son apenas un reflejo de lo mucho que se debe cambiar.

Vayamos a lo que parecería más simple pero no lo es. Como usted sabe, uno de los problemas que padecen los habitantes villahermosinos y quienes tienen que realizar sus actividades en la capital es el de los constantes hundimientos de las calles. Desde los pequeños y numerosos baches, hasta los hoyancos profundos en calles y avenidas.

Según el director de Obras Públicas del Ayuntamiento de Centro, José Antonio Tosca, en la ciudad se registran hasta 20 hundimientos por semana; algo así como tres por día. Uno cada ocho horas.

La explicación oficial es que existe un reblandecimiento del suelo por el deterioro de las vieja tuberías de aguas negras y de agua potable. Las filtraciones vuelven frágil las calles, nos dicen. Para las autoridades capitalinas es necesaria una rehabilitación casi total del drenaje y la tubería subterránea.

Sin embargo al parecer no es el único motivo de los hundimientos, porque desde 2007, poco después de las inundaciones, se advirtió que la mayor parte de la superficie en la ciudad no era suelo firme. En la capital del estado los constructores le fueron ganando espacio a las lagunas, pantanos, y zonas bajas mediante los rellenos. Lo siguen haciendo.

Estos rellenos, de acuerdo a especialistas en mecánica de suelos fueron hechos con cascajo, arena y tierra suelta. Aunque ahora utilizan técnicas más sofisticadas para los edificios, pero las calles fueron trazadas hace décadas. 

Podría decirse que la ciudad de Villahermosa requiere un diagnóstico a fondo para evitar costosos remiendos. Y no es tarea de un solo periodo de gobierno municipal, pero con un estudio integral se puede comenzar la obra a largo plazo.

 

PRESIDENCIA PRIVADA

 

EN FECHAS recientes se ha insistido en la necesidad de cancelar las pensiones vitalicias a los ex presidentes de la República. Este tipo de privilegios también existen en algunos otros cargos a pesar de que quienes lo desempeñan apenas cumplan una década o menos en el puesto. Es el caso, por ejemplo, de los magistrados electorales federales. Las pensiones de los ex presidentes implican una erogación millonaria año con año.

De acuerdo a una investigación de Ernesto Villanueva e Hilda Nucci, el ex presidente Felipe Calderón es el más caro del mundo, con un costo mensual de 5 millones de pesos. Por la erogación del personal que tienen a su servicio el más costoso es Luis Echeverría Álvarez, para cuya nómina se destinaron en 2015 casi10 millones de pesos. Los otros ex mandatarios que siguen recibiendo apoyos son Carlos Salinas, Vicente Fox y en menor medida Ernesto Zedillo.

Le comentamos aquí que sin ignorar la molestia que estos gastos ocasionan, el objetivo central de las pensiones a los ex presidentes era compensar el impedimento que tenían (¿o tienen?), de desempeñar otro cargo especialmente en las empresas privadas y mucho menos extranjeras. Sus funciones los colocan en acceso de información privilegiada y de seguridad nacional, pero también propicia para un tráfico de influencias e intereses.

Esto se hace evidente ahora que Felipe Calderón (PAN) fue designado consejero independiente de la empresa Avangrid, filial de la multinacional energética Iberdrola. Resulta que esa firma española fue una de las más beneficiadas durante el sexenio de Calderón ya que se convirtió en la principal empresa privada generadora de energía eléctrica, a pesar de los impedimentos constitucionales.

La oficina de Calderón argumentó que “las operaciones de Avangrid se circunscriben al mercado americano de energía y no tiene ni ha tenido ninguna participación en México”. Pero pertenece en un 81.5 por ciento a Iberdrola.

No es el único caso de un ex presidente o un alto ex funcionario que termina laborando para empresas transnacionales. ( Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla )