Elecciones, candidatos y presupuesto; dinero público, la tentación del regateo

Lunes, 28 de Agosto de 2017 12:07 Editor
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 *Entre la aprobación de los recursos y las aspiraciones de Meade

*Hipotecados: cinco estados del país deben más de lo que ingresan
*Tiene el PRI menos de la mitad de las gubernaturas y un tercer sitio
 
Víctor M. Sámano Labastida
 
LOS ESTADOS se han convertido en rehenes del presupuesto. Algunos están en tales condiciones que la llamada soberanía estatal es sólo un formulismo, sobre todo porque en materia económica y financiera sus márgenes no sólo se redujeron, sino que prácticamente desaparecieron. Algo similar ocurre con los municipios. Estamos a unos días que se conozca la propuesta presupuestal para el 2018 y hay por lo menos cinco estados cuya deuda rebasa sus ingresos: Coahuila, Chihuahua, Quintana Roo, Veracruz y Sonora.
Es algo para tener presente en el proceso que viene. 
Son cuatro los posibles candidatos del PRI a la Presidencia de la República, afirmó el senador Emilio Gamboa. En momentos en que todos los reflectores del tricolor apuntaban a José Antonio Meade, como resultado de las recientes reformas estatutarias del partido en el poder, un sector de ese instituto decide abrir la baraja: siguen en la carrera además Aurelio Nuño, Miguel Osorio Chong y José Narro Robles. 
También, dijo Gamboa quien ha estado en el primer círculo del poder desde los años ochenta, “están haciendo su mejor esfuerzo” por figurar Enrique de la Madrid, secretario de Turismo e hijo del ex presidente Miguel de la Madrid; así como el gobernador mexiquense Erubiel Ávila. Definitivamente descartó a Ivonne Ortega, ex gobernador de Yucatán, y dejó abierta la interrogante respecto a su amigo y socio Manlio Fabio Beltrones.
De todos los mencionados, quien tendrá la atención política en estos días es Meade Kuribereña, porque precisamente el día que arranca el proceso federal electoral entregará al Congreso el llamado “paquete económico”. En vista de que es aspirante a la candidatura presidencial por el PRI, ¿podrá separarse las negociaciones en la asignación a los estados de la necesidad del apoyo ante la inminente y compleja contienda electoral?
 
LA MODERACIÓN ELÁSTICA
EL TITULAR de Hacienda anunció que para el 2018 seguirán los recortes presupuestales, pero el que viene “será más moderado”. El cálculo inicial fue que reducirían en 80 mil millones de pesos. ¿Menor que los anteriores? En 2015 el recorte oficial fue de 124 mil millones; en 2016 un total de 132 mil millones de pesos y en 2017 el monto de lo ajustado se elevó a 239 mil 700 millones de pesos. 
Las cifras exactas de las reducciones que futuras se desconocen. El gobernador Arturo Núñez dijo recientemente que aún no estaba definido cuál sería el impacto para Tabasco. Aunque se ha insistido en un “trato especial” para la entidad por los efectos que en la economía tiene la caída de la industria petrolera, hasta el momento la respuesta ha sido muy limitada. 
El diputado federal y dirigente estatal del PRD en Tabasco, Candelario Pérez, sostiene que no serán 48 mil millones –que fue la cifra inicial que dio Meade-, como tampoco 80 mil millones del cálculo último, sino un total de 128 mil millones.
Luis Madrazo, titular de la Unidad de Planeación Económica de Hacienda, insistió en que será un “ajuste moderado”. Lo que sí adelantó el funcionario es que el recorte implicaría disminución de empleos en la burocracia. Más desempleo.
Desde 2015, el gobierno federal comenzó a aplicar una serie de ajustes drásticos al presupuesto para el poder central y los estados como resultado de un menor ingreso. Entre otros factores se cuenta el excesivo gasto oficial, pero sobre todo el impacto de la baja en las divisas petroleras: comenzó a aplicarse la reforma energética y al mismo tiempo se desplomaron los precios del crudo, la fuente principal de ingresos del exterior.
También se desplomó la confianza en el gobierno de Enrique Peña Nieto y esto representa ahora un desafío para el PRI. ¿El arreglo de las finanzas se sujetará a los cálculos políticos? Lo veremos muy pronto.
El PRI llegará a las elecciones del 2018 con sólo 15 gubernaturas, menos de la mitad del total. En este bloque se cuenta Chiapas, donde comparte el poder con el PVEM. En la negociación del futuro candidato no existe unanimidad entre los mandatarios priistas, de manera que buscarán obtener los máximos beneficios. Pero también encabezan algunos de los estados más endeudados.
En el caso del PAN no es diferente, aunque este partido llega con una de sus cuotas más altas de estados bajo su mando, ya sea de manera directa o con alianzas (en las que casi siempre es dominante): 12 gubernaturas.
El PRD sólo tiene cuatro, dos con peso estratégico: la Ciudad de México y Tabasco. Hay un gobernante sin partido: el de Nuevo León.
Habría que recordar que en la elección presidencial del 2006, el PRI contaba con 17 entidades gobernadas por ellos; en 2012 se recuperaron a un máximo de 21 estados, una cantidad similar a la que tenían cuando perdieron el poder en el año 2000. Ya se sabe, en 2006 quedaron en tercer sitio de la contienda por Los Pinos. Actualmente las encuestas colocan a este partido también en una tercera posición con una sensible disminución de votos.
MONEDA AL AIRE
SE INSISTE ahora en que el dilema del PRI es: jugar todo a un esquema como el de Edomex con una oposición dividida –para lo cual necesita a un PAN debilitado-, o apostarle a la fórmula de cuando fue preferible entregar temporalmente el poder a Acción Nacional y no a Cuauhtémoc Cárdenas. Ahora, el riesgo a exorcizar por los priistas es López Obrador.
Lo que está en juego es el sistema establecido en los años ochenta conocido como “neoliberalismo”, un modelo tecnocrático frente al denominado “populismo” de las izquierdas. En intervalo puede haber matices. ( Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla )