Transporte público, confinamiento y la nueva movilidad post pandemia

Sábado, 09 de Enero de 2021 00:23 Editor
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 Escala Crítica/Columna diaria

*Las grandes ciudades deben replantear el traslado de personas
*México, fallidos intentos; los exitosos, rebasados por la demanda
*Narciso Andrade y el Plan de Movilidad Integral de Tabasco 
 
Víctor M. Sámano Labastida
 
 
LA PANDEMIA del COVID-19 obligó a replantear el tema de la movilidad en el mundo y en especial en las grandes ciudades. Como usted sabe, para combatir la transmisión del coronavirus entre las medidas principales se estableció el confinamiento para desmovilizar en lo posible a los sectores calificados como “no indispensables”. Cuando se inició la reapertura una de las dificultades planteadas fue el del hacinamiento en el transporte público. Sobre todo en las grandes ciudades.
Hubo medidas extraordinarias y a veces contradictorias. En algunos lugares del planeta se ampliaron los horarios del transporte y se incorporaron unidades oficiales y particulares para poder garantizar el servicio expedito y ordenado. También se establecieron límites de cupo, sana distancia y estricta vigilancia de otras medidas sanitarias. En otros sitios se ordenó restricción de horarios.
En la República, urbes como la Ciudad de México dan servicio en transporte público –sin contar taxis- a más de 6 millones de usuarios. Su zona metropolitana incluye 22 millones de habitantes; otras como Guadalajara, tienen una zona metropolitana de 5 millones y Monterrey, 4 millones. Son concentraciones poblacionales donde las autoridades han modernizado el transporte, pero con un déficit que no han podido resolver…y que se agudiza con las obligadas medidas anti epidemia. 
 
VÍAS Y UNIDADES
 
A VILLAHERMOSA los registros conocidos le establecen una población metropolitana de más de 870 mil personas y se le ubica como la segunda ciudad más habitada del sureste. Es conocida no solamente su falta de transporte eficiente y los fallidos intentos por ordenar este caos, sino debe cargar también con la saturación de sus calles y escasas avenidas. Esto último se busca atenuar con los distribuidores viales que por fin se están construyendo; pero sin duda que la ciudad requiere un reordenamiento urbano en serio…y no tiene espacio.
Para la capital tabasqueña, la emergencia sanitaria del COVID-19 puso en evidencia las condiciones del transporte en sus unidades, en sus operadores y sus concesionarios. No hay vehículos suficientes para garantizar la sana distancia, como tampoco la conciencia para hacerlo.
Con el inicio de año la Secretaría de Movilidad (antes de Transportes), anunció la aplicación de las nuevas disposiciones en la ley del sector. Su titular Narciso Oropeza informó sobre la normatividad en el servicio de taxis según la cual desaparecen los “colectivos”  y sólo operarán –aseguró- los “especiales” con tarifas sectorizadas. De la misma forma sostuvo que esta medida permitirá terminar de una vez por todas con las unidades “piratas” y los abusos de los conductores contra los usuarios. Algunas personas se han quejado ya de que en la práctica significa un incremento de tarifas y mayor dificultad para disponer del servicio, pero es muy pronto para evaluar y –en su caso- hacer ajustes. 
La nueva normatividad obliga a los concesionarios de taxis a operar con unidades en buen estado, con un máximo de ocho años de antigüedad.
 
NO REPETIR ERRORES
 
AFIRMÓ Oropeza Andrade que se avanza en la modernización del transporte y en la garantía de un traslado seguro. Varias de las unidades son utilizadas para cometer o encubrir ilícitos.
En lo que se anunció como Movilidad Integral de Tabasco (Movitab), el funcionario afirmó que habrá recursos para financiar el transporte público, así como obras para atención de las necesidades de los peatones. De entrada, desaparecerá el llamado TransBus, que en febrero de 2008 el entonces gobernador Andrés Granier presentó como “la solución histórica” en un Programa para la Transformación del Transporte Público. Se creó entonces una empresa que según denuncia de administraciones subsecuentes y demandas interpuestas sólo sirvió para el desvío de recursos públicos.
Con la desaparición del TransBus, ahora se presenta Movitab que –se dijo oficialmente- incorpora las primeras 14 unidades y contará con un fideicomiso de 106 millones de pesos. (En el gobierno federal desaparecieron los fideicomisos). Están en trámite la adquisición de 60 unidades más. 
Como le decía, la cuestión del transporte en las grandes ciudades –y en general para toda la población- no sólo es complejo sino que ahora las circunstancias la han hecho todavía más difícil. Pero es un servicio esencial que exige recursos, pero sobre todo la eficacia de las autoridades en evitar que se repita la historia de los derroches, desvíos y trampas. 
También, claro, hay que pensar en los peatones y en el transporte alternativo; de igual manera poner orden en el existente, como los pochimóviles que han propiciado surgimiento de mafias.
 
AL MARGEN
NOS INFORMA Raúl López Deantes, presidente de la  Fundación Filantrópica “Dr. Antonio Osuna Rodríguez”, que el lunes próximo entregarán implementos médicos y fármacos en general para el personal del Hospital Regional de alta Especialidad Dr. “Juan Graham Casasús”. Apunta que los apoyos otorgados serán de gran ayuda al personal médico en esta dura batalla contra el COVID 19 que están librando en beneficio de la sociedad tabasqueña. El acto se realizará con todas las medidas sanitarias ordenadas por las autoridades.
RECUERDE: Tabasco está en emergencia extraordinaria por el aumento de contagios. El inicio de la vacunación no es indicio de que se acaba la pandemia, estamos en una segunda –y más peligrosa- oleada. ( Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla )