Escala Crítica/Columna diaria
*El Transbús, un proyecto que urge revisar a fondo
*México, el país con más habitantes en el extranjero
*Protección: seguridad pública y seguridad social

Víctor M. Sámano Labastida

UNO DE LOS MAYORES problemas en las grandes ciudades es sin duda el transporte público. La alta concentración de personas, el creciente número de vehículos en circulación, la reducida amplitud de las calles, la distancia de los centros de trabajo. Varios son los factores que complican el traslado de las personas. Es el caso de Villahermosa, capital tabasqueña, y una de las tres ciudades más pobladas del sureste junto a Mérida y Tutxla Gutiérrez.

Varios han sido los intentos por resolver el problema del transporte urbano en una ciudad en la que laboran o viven más de 600 mil habitantes. En los años ochentas, hace unos 30 años, existió un sistema de autotransporte público administrado por el estado, SAETA.
Este sistema entró en quiebra en los tiempos en que el gobierno se deshizo también de sus inversiones en varios sectores. Fue sustituido por el transporte privado que multiplicó la circulación de las llamadas combis y los autos de alquiler.
En el sexenio de Andrés Granier se anunció lo que sería –se dijo- un revolucionario sistema de transporte urbano, el Transbús. Para su operación se modificaron calles, se sacaron de circulación varias rutas de combis y se establecieron costosos esquemas de subsidios.
Ahora se informa que el sistema de Transbús está prácticamente en quiebra. De las 125 unidades 40 están fuera de servicio. Por si fuera poco, los socios del Transbús aseguran que la empresa tiene adeudos de unos 12 millones de pesos. Algunos voceros del gobierno han señalado que mantener en las actuales condiciones las dos líneas del Transbús resulta sumamente costoso. Pero también la empresa ha sido objeto de mala administración y denuncias públicas de corrupción.
Es complejo atender el servicio de transporte urbano. Pero es mucho más complicado y riesgoso cuando hay malos manejos y una falta de orden en su operación. Lo que fue presentado como un sistema que resolvería el transporte en Villahermosa está actualmente en grave crisis. Un mal transporte tiene altos costos para la economía. Se trata de uno de tantos problemas urgentes e importantes para el nuevo gobierno. El costo de los rezagos. 

UN PAÍS QUE SE VACÍA

MÉXICO TIENE el poco honroso primer lugar en migración. Nuestro país encabeza las naciones que expulsan mano de obra. Tabasco era antes un estado que recibía migrantes de otros estados; era receptor, no expulsor. Desde hace por lo menos unos diez años se integró a los estados cuya población tiene que buscar trabajo en otras plazas. Este fenómeno ha ido a la par de lo que sucede en todo el país.
Un reporte de Naciones Unidas refiere que unos 12 millones de mexicanos trabajan en el extranjero. India, que es otra nación con alta migración, tiene en el extranjero a unos once millones 400 mil personas. Resulta interesante observar que China, el país más poblado del mundo, tiene en el extranjero poco más de ocho millones de personas. Menos que nuestro país.
La emigración es un indicador de la falta de oportunidades de empleo.
Podría decirse que la cercanía de Estados Unidos permite que los mexicanos tengan más oportunidades de pasar la frontera. Pero también hay otros factores. En 1990 México tenía cinco millones de paisanos trabajando en el extranjero. Ahora la cifra se duplicó.
Pero también cada vez es mayor el número de personas con alguna profesión o especialidad quienes emigran. Es una inversión que sale del país. Una riqueza que se va a rendir fruto a otras naciones.

LA LEY Y LA REALIDAD

EN LOS AÑOS RECIENTES mucho se ha hablado en México de la seguridad pública. Se incrementaron los gastos en la contratación de policías y en la compra de armamento. Pero hay una inseguridad de la que casi no se habla: la social, referida a la protección que las instituciones deben ofrecer en materia de salud, maternidad, invalidez, vejez e inclusive desempleo.
México es el país que puso ejemplo en el mundo al establecer en su Constitución a principios del siglo pasado una serie de leyes para proteger a la población y obligar al Estado a garantizar medicina, salarios, protección laboral. Pero una cosa son las leyes y otra la realidad.
Aunque se establecieron mecanismos para garantizar la educación pública, la atención médica, la adquisición de vivienda, en nuestro país existe un retroceso y actualmente unas 65 millones de personas no tienen seguridad social.

AL MARGEN

UNA LABOR de tejido fino y acelerado tendrá que realizar Roberto Romero, dirigente estatal del PRD, con los diputados de su partido cuya bancada a pesar de tener formalmente 19 lugares en el Congreso no han logrado presentar un frente común. No es sólo que haya unos seis grupos en la fracción solaztequista, sino que la mayoría está trabajando para una futura posición en las alcaldías y hasta en las diputaciones federales. Mientras, los diputados del PRI actúan como si una mano invisible los mantuviera en la misma ruta. Es la ventaja de contar con la Presidencia.

LA SOBERANÍA nacional, la participación democrática, los derechos de las mujeres, fuero algunos de los temas que abordaron los jóvenes participantes en el Primer Certamen Regional de Oratoria, realizado ayer en Nacajuca, y al cual este columnista fue invitado como parte del jurado calificador. Una experiencia interesante que agradezco a los organizadores representados por Gabriela Sánchez Isidro. Hubo jóvenes de Nacajuca, Jalpa de Méndez y Paraíso. Fue promovido por el Instituto de Cultura, el Instituto de la Juventud, el Ayuntamiento de Nacajuca y el Foro de la Juventud Tabasqueña. ( Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla )