GONZÁLEZ PEDRERO, UNA REFERENCIA; ROMPER INERCIAS, ADAPTARSE AL CAMBIO

Miércoles, 22 de Mayo de 2013 00:52 Editor
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Escala Crítica/Columna diaria
*La sociedad del espectáculo y las necesidades de información
*Nada es lo que era; la idea del progreso se diluyen en lo fácil
*Acción Nacional: obtuvo el poder, a costo de perder el partido
Víctor M. Sámano Labastida

“QUE LOS HECHOS hablen”, dijo el ex gobernador Enrique González Pedrero poco después de recorrer las instalaciones del diario Presente, aquí en Villahermosa, el domingo pasado. Había escuchado la explicación de la actividad periodística en este medio y recordó el lema que caracterizó a su administración (1983-1988). En aquel tiempo, durante su campaña pidió “que hable Tabasco” para recoger la demanda popular; ya en el gobierno ofreció que “hablarían los hechos” y la culminación de la fórmula fue: “los hechos hablaron”.

Este fin de semana el destacado intelectual y profesor universitario estuvo en Tabasco. Contó diversas actividades privadas, acudió a la biblioteca de la Universidad Intercultural de Oxolotán que lleva el nombre de la doctora Julieta Campos (qepd), compartió largas y animadas pláticas con amigos y conocidos. Estuvo acompañado de José Eduardo Beltrán Hernández, quien fue secretario de Gobierno durante su mandato, así como por el empresario Ignacio Cobo González.

TRANSFORMACIÓN CONSTANTE

SON LOS PROPIOS medios y los periodistas los que han de saber el papel que los corresponde en cada una de las etapas de la vida democrática del país, comenta con cautela González Pedrero cuando le pregunto sobre la comunicación en épocas de alternancia partidista. Todo está en constante transformación, dice quien antes había recordado un excelente ensayo de Mario Vargas Llosa sobre “La sociedad del espectáculo”.
Me remito entonces a un texto que el propio González Pedrero elaboró para una conferencia sobre “Los grandes problemas nacionales”, organizada en  los Diálogos por la Regeneración de México (Club de Periodistas, 15 de mayo de 2012).
Comentó ahí que “el periodismo también ha recibido la impronta de los nuevos tiempos. Las noticias cada vez importan más, no tanto por su significación económica, política, cultural y social, sino por su novedad. Ha de ser “sorprendente, insólita, escandalosa y espectacular”, citó a Vargas Llosa para agregar la conclusión a la que llega el peruano y premio Nobel de Literatura:
“No está en poder del periodismo por sí solo cambiar la civilización del espectáculo, que ha contribuido a forjar. Pero —añade Vargas Llosa— hemos conseguido una victoria pírrica, un remedio peor que la enfermedad: vivir en la confusión de un mundo en el que paradójicamente como ya no hay manera de saber qué cosa es cultura, todo lo es y ya nada lo es”.

PROGRESO Y RETROCESO

DIJO GONZÁLEZ Pedrero hace un año en aquella conferencia que menciono sobre los Grandes Problemas Nacionales: “Quiere todo esto decir, me pregunto no sin angustia, yo que siempre creí en la teoría del progreso —con algunos asegunes— que, como quiere el viejo dicho, “todo tiempo pasado fue mejor”? Esto es algo que hay que tomar en consideración antes de emitir un juicio definitivo sobre un asunto de tanta importancia. Por lo pronto, el Estado ya no es lo que era; la cultura ya no es lo que era; en definitiva, ya nada es lo que era. ¿Es la velocidad en la que nos movemos, la frivolidad que nos rodea, la trivialidad de lo que hacemos?”
Quisiera, a riesgo de forzar la interpretación, remitirme a otra reflexión realizada por González Pedrero respecto a los partidos políticos (“La lección de la elección”, La Jornada, 5/VIII/1988) pero que podríamos aplicar a los medios de comunicación y a los periodistas.
Escribió: “Los partidos políticos, sin excepción, están llamados a romper inercias. Tienen que adaptarse y ponerse a la altura de un pueblo que votó, sobre todo, por la democracia…El tránsito democrático que demanda el pueblo de México consistirá, en buena medida, en ajustar los métodos de la política con las necesidades y expectativas concretas de la sociedad”.
Digámoslo así: los periódicos, periodistas y medios están llamados a romper inercias, ajustar sus métodos con las necesidades y expectativas concretas de la sociedad.

EL PAN SE MULTIPLICÓ

PARECE EN VÍAS de cumplirse la advertencia de Carlos Castillo Peraza: el riesgo de que por ganar el poder en el PAN se perdiera el partido. Los grupos que dividieron al blanquiazul ya estando en el gobierno parecen irreconciliables. Primero parecía fácil distinguir entre los doctrinarios y los neopanistas, pero la irrupción de una serie de intereses a corto plazo llevó a ese instituto a un punto de crisis.
Primero fue la drástica disminución de militantes por la depuración de su padrón. Perdió más del 80 por ciento del listado que presumía durante la más reciente campaña por la Presidencia. “No es un partido de masas, sino de cuadros”, argumentaron con razón sus defensores. Pero eso no quita que del más de millón 800 mil ciudadanos entre militantes y adherentes se quedara ahora con sólo 368 mil miembros.
Podría pensarse que esta reducción dejó un partido más sólido, sin embargo en la cúpula los conflictos llegaron al punto del insulto y la descalificación. No sólo fue destituido Ernesto Cordero de la coordinación de los senadores, también algunos miembros de la dirigencia del PAN podrían terminar en los tribunales con denuncias por difamación. El ex aspirante presidencial Cordero, confrontado con Gustavo Madero, representa al grupo de Felipe Calderón.
Un partido caracterizado por la disciplina y la institucionalidad (los bien portados), ahora se resquebraja. Es prácticamente imposible que retenga la gubernatura de Baja California en julio próximo. Fue su primera posición de importancia en el largo proceso de la alternancia, ¿será la última frontera?
Dijo Ernesto Cordero que la actual dirigencia está en camino de convertir al PAN el “satélite del PRI”. No hay que ignorar que el PAN maderista está más cercano al PRD de Los Chuchos con quienes va en alianza en varios estados este año y con el cual mantiene un frente común en las negociaciones del Pacto por México.

AL MARGEN

GOBERNADORES del Veracruz, Chiapas, Campeche, Yucatán, Quintana Roo, Oaxaca y Tabasco se reunieron en Villahermosa con el “gabinete de seguridad” de Enrique Peña Nieto. Aquí estuvieron Miguel Osorio Chong y Jesús Murillo Karam. El tema Andrés Granier fue nota pública. Los procesos siguen. La seguridad nacional es ahora seguridad pública y a la inversa. Se requiere no sólo la coordinación entre estados para prevenir y combatir a la delincuencia, también acuerdos con países en particular con Belice y Guatemala. Ya no hay fronteras entre para el delito; no lo debe haber para las leyes. ( Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla )