Pemex, uno de los mayores desafíos del presidente López Obrador y su equipo

Jueves, 27 de Mayo de 2021 00:46 Editor
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 Escala Crítica/Columna diaria

*La compra de la refinería en Houston, entre defensas y críticas
*Lograr la autosuficiencia, pero también impulsar la eficiencia 
*Renuncian la directora de Conagua y el coordinador del SMN
 
Víctor M. Sámano Labastida
 
COMO ERA de preverse el anuncio de la compra de la totalidad de las acciones de la refinería Deer Park por parte de Pemex a la Shell desató un intenso debate. Y seguirá. El gobierno mexicano defiende la operación para fortalecer su capacidad de procesar gasolinas, en tanto que los críticos lo menos que dicen es que México adquirió problemas, porque en principio un tribunal de Holanda ordenó a la multinacional migrar hacia energías limpias, por lo que deberá cerrar sus refinerías, además que la compra-venta está sujeta a la autorización de una comisión reguladora de Estados Unidos.
Ayer el presidente Andrés Manuel López Obrador convocó en Palacio Nacional a su gabinete de energéticos y a representantes de órganos reguladores para explicar y defender la compra de la refinería que México compartía con la Shell.
Dijo AMLO que una vez que el objetivo es que Pemex deje de vender petróleo crudo para comprar productos refinados. Hay que procesar en casa. Expuso: “Nos convertimos en el país petrolero del mundo que más compra gasolinas y otros petrolíferos al extranjero, entonces ahora se está llevando un cambio (…), nuevo plan de negocios, ya no vamos en el futuro a vender petróleo crudo y comprar gasolinas, vamos a producir en México los combustibles que se requieren en el país con el propósito de que tengamos autosuficiencia”.
TENER PETRÓLEO Y REFINARLO
 
SE ENTIENDE que es un proyecto ambicioso porque para lograrlo Pemex deberá tener en operación óptima las seis refinerías existentes, la nueva que se construye en Dos Bocas, Tabasco, y con el añadido de la de Deer Park (Houston, EEUU). Pero también la petrolera mexicana tendrá que disponer de un volumen de crudo constante en un tope fijado como máximo de 2 millones de barriles diario de extracción.
Octavio Romero Oropeza, titular de Pemex, sostuvo que con la incorporación de Deer Park, Dos Bocas y las seis refinerías existentes, tendremos  en México, el país podrá producir 1 millón 362,000 barriles diarios de combustibles para cubrir la demanda interna. La refinería de Deer Park tiene capacidad para refinar 340 mil barriles diarios de gasolinas bajas en azufre, diésel y turbosina. Este volumen es similar al previsto para Dos Bocas.
Argumentó Romero Oropeza que a pesar de que en Europa y Estados Unidos apuntan hacia las energías limpias, la India, China y países latinoamericanos todavía tienen y tendrán una alta demanda de combustibles. Por eso México necesita garantizar su propio abasto, dijo. Otro objetivo, reiteró por su parte el presidente López Obrador, es lograr una política de precios bajos a los combustibles en México.
En este aspecto, la polémica toma otros matices porque junto a la posible reducción en los precios –contrariamente a Europa que los incrementa para reducir la demanda de combustibles fósiles-, México requerirá un plan para el uso eficiente de la energía. El desperdicio va contra la austeridad. 
Por cierto que ayer en la conferencia de Palacio Nacional, donde también estuvieron los consejeros de Pemex, se explicó que del costo de los 600 millones de dólares de la parte correspondiente de Deer Park, México pagará 106 millones de dólares en efectivo y 496 millones de dólares serán para cubrir la deuda de Shell.
La apuesta del presidente López Obrador por Pemex como palanca no sólo del desarrollo sino de su propuesta para la Cuarta Transformación es todo un desafío. Recordemos que Pemex no depende sólo de la voluntad y el compromiso de los protagonistas mexicanos en la industria, sino también de la disponibilidad de reservas asequibles…y del intrincado mercado mundial, con intereses y ambiciones. 
Un paso decisivo para concretar la compra-venta es la autorización del gobierno de Estados Unidos a este tipo de operaciones. Pero el anuncio sin duda resulta espectacular.
 
RENUNCIANTES DE TEMPORADA
 
NO LE TOCARÁ a Blanca Jiménez Cisneros lidiar con el problema de los huracanes, inundaciones y operación de presas en la temporada que ya inició. La actual directora de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), dejará la dependencia a finales de mayo y observará el temporal desde Francia, donde posiblemente ya esté despachando como embajadora. Quien entrará en relevo de Jiménez Cisneros es Germán Martínez Santoyo, un ingeniero civil egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México.
De acuerdo a sus antecedentes, conoce las entrañas del tema hidráulico tanto en lo teórico – impartió la materia en la UNAM-, como en lo técnico y administrativo – fue director del Organismo de Cuencas Centrales del Norte de la Conagua. 
Quien también deja la coordinación general del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), es Jorge Zavala Hidalgo, un especialista egresado de la UNAM y que antes de que en julio de 2019 fuera nombrado en el cargo había sido -de 2006 a junio de 2019-, jefe del Servicio Mareográfico Nacional operado por el Instituto de Geofísica de la UNAM.
La temporada que ya está encima es un gran desafío para la Conagua y el SMN, sobre todo por las dramáticas y costosas experiencias del año pasado.
 
AL MARGEN
 
LAS ELECCIONES se realizarán sin contratiempos, sostienen los consejeros del IEPCT, mientras los dirigentes de los partidos opositores (PRI y PRD) advierten sobre los riesgos de que se invaliden los comicios en unos cinco municipios. No es un escenario deseable. Tabasco ya vivió dos grandes anulaciones: aquella de la “causal de nulidad abstracta” en año 2000 en los comicios para gobernador, y la del 2015 en el municipio de Centro “irregularidades sustanciales y graves” en la jornada electoral. ( Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla )