*Comienza batalla por el “voto útil”, reacomodo de campañas

*Yolanda, consolidar Morena; MAD y AGM, franja en disputa

*Complicaciones para la alianza opositora; informe Citibanamex

 

Víctor M. Sámano Labastida

 

SEGURAMENTE en la última etapa de esta campaña electoral los candidatos y los partidos recurrirán al llamado del “voto útil”, aunque ya les ganó el tiempo. Sólo quedan 6 días de campaña, aunque en realidad los cierres comenzarán este domingo. El “voto útil” es aquel al que recurren para convencer de sufragar por una opción que aunque no sea la suya es contraria a la que no desean que gane. Otros definen el voto útil como el sufragio por quien les asegura un beneficio inmediato o mediato. Muy poco se piensa en el largo plazo.

En países donde existe la segunda vuelta, ese mecanismo del “voto útil” se transforma en un acuerdo explícito e implícito entre varias formaciones políticas y ciudadanos. La virtud es que se pueden establecer compromisos concretos.

En la actual etapa también observaremos el reajuste de las campañas  por lo menos de los candidatos a la alcaldía de Centro. Mientras que Yolanda Osuna, la abanderada de Morena, tiene el reto de aglutinar a quienes en 2018 apoyaron en las urnas a esa organización y evitar que haya fugas hacia otra opción –con retenerlos le bastaría-, los aspirantes Manuel Andrade del PRD y Andrés Granier del PRI-PAN están a la conquista de más votantes.

Por su parte Feliciano Wong, en el Partido Verde, debe conservar a quienes ya votaron por el PVEM en 2015 y 2018, y quizá sumar a quienes por primera vez acudirán a las urnas.

El resto de los candidatos en Centro, entre ellos Ana Bertha Vidal y Martha Osorio, tienen que esforzarse por llevar nuevos votos a las siglas que representan.

Algo similar sucede en otros municipios, pero la capital es más visible.

 

ESTIRA Y AFLOJA DE MAD-AGM

LA LÓGICA indicaba que al darse a conocer las candidaturas en todos los partidos, primero vendría un periodo de inconformidades internas –con reparto de posiciones o renuncias- para luego seguir una campaña que les permitiera “ganar” a simpatizantes que están en otros partidos; luego apuntarían hacia los ciudadanos sin partidismo definido.

En el caso de Morena, tuvo el 2015 y el 2018 para nutrirse de quienes antes estaban en el PRD; partido al que prácticamente “vació” en esos dos procesos. Serían muy pocos los que habiéndose quedado con los solaztequistas ahora en el 2021 decidieran ponerse la playera guinda. Para el PRD el mal ya estaba hecho. Por el contrario, no hay elementos para considerar que los lopezobradoristas o morenistas convencidos pudieran cambiar el sentido de su voto. No existió en la oposición una clara opción de izquierda que pudiera drenar hacia otras siglas sus simpatías.

Como le comenté en otra ocasión, el PRI tabasqueño sufrió una considerable sangría de militantes y cuadros medios en el 2015 que se pasaron al PVEM junto con Federico Madrazo. En el 2018 ya no sucedió lo mismo, pero el partido del Tucán fue uno de los pocos –si no es que el único- que no cayó estrepitosamente ante la avalancha morenista. Conservó casi sus mismos votos que en los comicios anteriores y se colocó entre los cuatro partidos con representación en el Congreso. Además de que ganó una alcaldía y ahora va por más. Dicho esto sin entrar a fondo en lo que esa organización significa.

En este proceso de 2021, también ya lo mencionamos, el tricolor enfrenta otro desafío: la competencia por los mismos votos que pudiera significar Manuel Andrade, pero ahora desde el PRD.

 

ADVERSARIO NATURAL

UNOS MENSAJES recientes del ex gobernador priista ahora con los solaztequistas ofrece una idea de lo que pudo ser su campaña: buscar llevar hacia el PRD el mayor número de votos…del tricolor. Esto, obviamente, significaba que su adversario natural en un principio sería el abanderado del PRI, Andrés Granier.

Es cierto que logró llevarse algunos antiguos cuadros del PRI como Francisco Herrera y Róger Pérez, pero no trascendió ninguna desbandada. Unos recientes mensajes de Andrade indican hacia dónde está reorientando su campaña, aunque me parece que va contra el tiempo: realiza una serie de contrastes y cuestionamientos contra el abanderado del tricolor, que es donde estaría el nicho de su posible cosecha. 

¿Veremos en los próximos días una intensificación de esta vertiente en el discurso de MAD? Sin duda que el ahora candidato perredista tiene que aportar el mayor número de votos a un partido que no era el suyo hasta hace unos meses, pero que necesita urgentemente la inyección de un porcentaje que le asegure presencia en el Congreso local. 

Recordemos que PRI y PRD tiene que enfrentar el dilema de ser coaligados a nivel nacional, por las diputaciones federales, pero al mismo tiempo competidores por las posiciones locales.

 

ADELANTANDO VÍSPERAS

DOS ESTIMACIONES reavivaron el debate sobre las posibilidades de Morena en los comicios de este 6 de julio. Se difundieron los resultados de un análisis de Citibanamex a partir de una encuesta que realizó Varela y Asociados: “la coalición PAN-PRI-PRD no parece lo suficientemente competitiva como para superar a Morena y sus aliados en el control mayoritario de la Cámara de Diputados”, señala. 

De acuerdo a estos datos, Morena tenía hasta el pasado 5 de mayo 46% de la intención efectiva de voto para diputados federales; el PVEM, 5%, y el PT 3%.  En tanto que PAN, PRI y PRD, recibieron 17%, 15% y 5% de intención efectiva, respectivamente. Lo que da mayoría a Morena y sus aliados. 

Por su parte, Roy Campos, quien encabeza la firma Mitofsky –la encuestadora más conocida a nivel nacional-, sostuvo que Morena puede llevarse hasta 9 de los 15 estados en los que habrá elecciones para gobernador.

 

AL MARGEN

NADA está dicho todavía. En estas elecciones juegan un papel protagónico los consejeros del INE y los magistrados del TEPJF. Como Nunca antes. ( Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla )