Escala Crítica/Columna diaria
*Confirma Ruz Hernández que irán juntos la Pino Suárez con el PRD, PT y MC
*Bella y peligrosa, la actividad más antigua del mundo de luto
*Moisés Sánchez Cerezo, activista y periodista asesinado en Veracruz
Víctor M. Sámano Labastida
CUANDO se abrió la posibilidad del registro de nuevos partidos, no sólo tuvieron abierta la puerta las organizaciones nacionales; también las agrupaciones estatales. Le comentamos en este espacio que en Tabasco existía la posibilidad de que los dirigentes de la Agrupación José María Pino Suárez buscaran darse de alta como partido político estatal. “No queremos dividir más al bloque progresista”, dijeron. Sólo Sociedad en Acción, de Ariel Cetina, hizo la solicitud y fue rechazada.
Ahora el presidente saliente de la Pino Suárez, José Ángel Ruiz Hernández, anunció que durante la décimo cuarta asamblea de esa organización fue suscrito un acuerdo con el PRD, Movimiento Ciudadano y Partido del Trabajo para postular candidatos tanto para diputados federales, como locales y a las alcaldías.
Ruiz Hernández, también funcionario estatal, señaló que hay identidad de intereses entre la agrupación pinosuarista fundada por el actual gobernador Arturo Núñez y quienes formaron la coalición ganadora en 2012.
El domingo reciente asumió la presidencia de esa organización Marcela Peña Montalvo a quien sucederá en el 2016 Fernando Sánchez López. La secretaria general es Flora Iglesias Ruiz y el presidente para la comisión consultiva 2014-2016, Arturo Núñez Jiménez.
Una posibilidad abierta en las leyes locales es la de las candidaturas comunes, que posiblemente sea la vía que utilice este bloque. Sin necesidad de acuerdos formales de coalición, los partidos pueden registrar al mismo candidato.
La otra corriente que formó la coalición Movimiento progresista fue el ala lopezobradorista que ahora competirá como un partido nuevo. ¿Habrá alianza de la Pino Suárez y el nuñismo también con esta corriente?
NI UNO MÁS, SIGUEN IMPUNES
EL PRIODISMO es el oficio más bello del mundo, dijo en varias ocasiones el escritor y periodista Gabriel García Márquez. Es también, sobre todo en México, uno de los oficios más peligrosos. En agosto de 2010, un millar de comunicadores de varios estados del país se manifestaron ante la Secretaría de Gobernación federal. La consigna fue exigir “Ni uno más”, para requerir de las autoridades su responsabilidad en la garantía a la seguridad de los periodistas y de la libre expresión.
Ya entonces, el ataque a los comunicadores y a los activistas sociales –que en muchos casos son lo mismo- había llegado a límites intolerables para un sistema que se ofrece como democrático. Dos años antes, en octubre de 2008, los editores de impresos en México denunciaron ante la Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) reunida en Madrid, la “espiral de violencia” que también cobraba víctimas en el gremio.
El también director de El Universal, Juan F. Healy, dijo entonces que “la falta de resultados en investigaciones de crímenes y atentados contra periodistas y medios de comunicación evidencia una ausencia de voluntad de los gobiernos estatales y federal para resolverlos”. Algo peor: la impunidad se convirtió en caldo de cultivo para la agresión y amenaza a uno de los pilares fundamentales de la vida en sociedad: la libertad de información. Y con ellas la libre expresión y la libertad de investigación.
Inclusive connotados comunicadores establecieron en uno de los mementos de crisis una comisión que se encargaría de impedir que el silencio siguiera siendo el mejor aliado de los verdugos y los beneficiados de los crímenes. Aquella espiral de violencia no ha cesado.
DESAPARECIDO 23 DÍAS
EL VECINO estado de Veracruz se ha convertido en uno de los más peligrosos para los periodistas. La experiencia confirma que si los periodistas y las personas públicas sufren inseguridad, mucho más sucede con la gente común. Unos, se supone, tienen medios para hacerse escuchar.
Por esa y muchas otras razones debe preocupar lo que está sucediendo en el estado gobernador por Javier Duarte de Ochoa (2010-2016), surgido de las filas del PRI. Allá en un municipio conurbado de Veracruz, en Medellín de Bravo, fue encontrado el cuerpo sin vida de quien las autoridades identificaron como el periodista Moisés Sánchez Cerezo. Fue secuestrado hace 23 días.
Con el asesinato de Moisés Sánchez suman once los periodistas asesinados en Veracruz los cuatro años que lleva el gobierno de Javier Duarte. Uno de los crímenes más conocidos a nivel nacional fue el de Regina Martínez, corresponsal de la Revista Proceso.
Alarmante e indignante. Si bien todo crimen es repudiable, más lo es cuando entre los posibles responsables estén las propias autoridades. En el caso del secuestro y muerte del periodista Moisés Sánchez, la primera hipótesis involucra al presidente municipal de Medellín de Bravo, Omar Cruz Reyes, un político surgido del Partido Acción Nacional.
Las versiones oficiales indican que el chofer y escolta del alcalde de Medellín, así como el subdirector de seguridad pública, son los responsables directos del crimen. Las autoridades solicitaron al Congreso veracruzano el desafuero de Cruz Reyes, señalado como autor intelectual del asesinato.
Según el procurador Luis Ángel Bravo los testimonios indican que al periodista Sánchez Cerezo lo señalaron sus victimarios porque “calentaba la zona” y “pateaba el avispero”. Los ciudadanos que se informan y exigen caminan sobre una cuerda muy delgada
Sánchez Cerezo era director y reportero del periódico La Unión, de Medellín. La organización Artículo 19 emitió una alerta a escasas horas del secuestro, ocurrido el 2 de enero. Solicitó la intervención federal. Las autoridades estatales minimizaron el hecho señalando que el desaparecido no era periodista sino taxista y activista social. No se ejerció oportunamente la facultad de atracción de las indagatorias que tiene la PGR.
Como usted sabe, aún sigue abierto el expediente de la complicidad del alcalde de Iguala, Guerrero en el crimen de los estudiantes de Ayozinapa. Ahora otro alcalde, este en Veracruz, aparece como relacionado con secuestros y asesinatos. Es la impunidad lo que favorece este tipo de delitos.
AL MARGEN
FUE REALIZADA una nueva Jornada de Acción Global por Ayotzinapa en apoyo a los familiares de los 43 estudiantes secuestrados y desaparecidos en Iguala, Guerrero. En la Ciudad de México hubo una masiva manifestación; otras movilizaciones ocurrieron en varios estados (Chiapas, Oaxaca, Baja California Norte), así como en plazas de Estados Unidos y Europa. Las autoridades consideran cerrado el caso; los familiares y activistas reclaman una investigación a fondo. (
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