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Home Escala Crítica VERACRUZ, IMPUNIDAD Y ELECCIONES; DE LO PARTICULAR A LO GENERAL

VERACRUZ, IMPUNIDAD Y ELECCIONES; DE LO PARTICULAR A LO GENERAL

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 Escala Crítica/Columna diaria

*En el espejo: Daphne, valentía frente a la desesperanza; un caso 
*Olvido gubernamental, memoria civil; amenazados por buscar justicia
*Rendición de cuentas ante las urnas; la perversidad de la política
 
Víctor M. Sámano Labastida 
 
VERACRUZ es uno de los estados donde habrá elecciones para gobernador en junio próximo. La bancada conjunta del PRI y del Partido Verde rechazó someter a juicio político al gobernador Javier Duarte a pesar de una solicitud de los legisladores del PAN y PRD, también presentada ante el Congreso de la Unión. No es casual, el actual mandatario veracruzano llegó al poder por una alianza de tricolor y verde, con la asociación de un partido local. El dirigente nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones, pidió “no juzgar a Duarte en las urnas”. ¿Y entonces?
Juan Manuel Portal, titular de la Auditoría Superior de la Federación (AFP), informó el pasado 19 de febrero que el gobierno de Veracruz tenía irregularidades por 4 mil 770 millones de pesos. Se presume un uso ilícito de tales recursos. Esto sin contar con la enorme deuda del régimen y la grave situación de inseguridad e impunidad.
Si se mira en el espejo de Veracruz, nuestro país repite historias de cinismo y  desesperanza. Espejo rajado que nos devuelve una imagen pública y privada de inercia e impunidad, todo por el mismo son, justo en el centro de lo intolerable. 
Realicemos ahora una labor de olvido, como al parecer quieren las autoridades federales para con Veracruz. 
RECUERDO QUE ES RECUENTO 
OLVIDE el lector los 36 mil millones de pesos de deuda pública acumulada en Veracruz, que equivalen a una quiebra técnica. Olvide los 2 mil 500 millones de pesos de presupuesto para actividades universitarias, que no aparecen y provocaron protestas públicas. Olvide los cientos de millones de pesos destinados a los Juegos Centroamericanos 2014 realizados en Veracruz, cuando se acentuó la debacle financiera del gobierno encabezado por Javier Duarte. Olvide a miles de pensionados que han sido maltratados por buscar respuestas ante la demora en pagos. 
Olvidemos a 6 jóvenes desaparecidos en Tierra Blanca y presuntamente ejecutados por el crimen organizado, después de ser detenidos por policías. Olvidemos a 3 jóvenes victimados en Papantla por los cuerpos del orden. Olvidemos cuerpos mutilados que aparecen en Xalapa, Córdoba y Orizaba, entre el anonimato y el miedo. Los familiares más osados acuden a oficinas burocráticas llenas de listas de desaparecidos que no van más allá de esas paredes. Nada trasciende hacia afuera. 
Olvidemos a los periodistas asesinados que en los últimos 6 años han hecho de Veracruz el estado más peligroso para ejercer el oficio de informar. 
Olvidemos, finalmente, que en junio las elecciones para gobernador devienen sagas familiares: Héctor Yunez/PRI y su primo Miguel Ángel Yunez/ PAN/PRD. Así, en lugar de proyectos coherentes para relanzar Veracruz, se vislumbra una batalla familiar. 
Lo que no debe olvidar el lector es el nombre de Daphne Fernández. Veamos por qué.         
LA VALENTÍA DE LA DENUNCIA
“DESESPERANZA es lo que sentimos, amenazados de muerte por buscar justicia. Es, para mí, lo peor: desesperación por falta de esperanza”. Palabras de la abuela de Daphne Fernández. ¿Quién es Daphne? Una menor de edad ultrajada en Boca del Río el 2 de enero de 2015, por 4 jóvenes ahora conocidos  como ‘los Porkys de Costa de Oro’, hijos de familias adineradas. 
Puesto que Daphne dio la cara, luego de duras deliberaciones familiares, en denuncia penal interpuesta el 16 de mayo de 2015, aquí se citan los nombres de los acusados: Diego Cruz, Jorge Cotaita, Enrique Capitaine, Gerardo Rodríguez. Una pregunta es pertinente, ante la denuncia: ¿cuántos casos de agresión sexual quedan entre sombras, como tabú familiar acordado como mal menor? Para ubicar la complejidad emocional de este dilema (denunciar o no denunciar una violación), puede leerse la novela Libertad (2011), de Jonathan Franzen. Aquí reproducimos el siguiente diálogo (página 65), entre un padre y su hija ultrajada: 
“-¿Tú me crees? -Sí. -¿Y mamá? -Claro que sí. -Y entonces, ¿qué hago?
Su padre se volvió hacia ella como un abogado. Como un adulto dirigiéndose a otro adulto.
-Déjalo estar. Sigue adelante con tu vida. -¿Cómo? –Quítatelo de la cabeza. Sigue adelante. Aprende a andar con más cuidado. -¿Cómo si no hubiera pasado nada?”        
El caso Daphne se ha convertido en escándalo nacional, vía medios y redes sociales, aunque -en detrimento de las nuevas tecnologías- los llamados Porkys hicieron mofa de Daphne en redes sociales, luego de que su familia sólo exigía disculpas y que se alejaran. El caso se destapó primero en el instituto Rouger, en abril de 2015, donde estudiaban Daphne y 3 de los implicados.     
¿Y Daphne? He aquí su respuesta a quienes le reprochan su tardanza en la denuncia penal: “—Meses después intenté seguir con mi vida, a los ojos de los demás muchos podrán decir que ‘estaba bien’, pero, ¿quiénes estaban conmigo en las noches? Cuando lloraba hasta quedarme dormida, cuando me deprimía, cuando destrocé mi cuarto varias veces por enojo e impotencia, ¿dónde estaban todos aquellos que el día de hoy se atreven a juzgarme? Sí, he tomado, sí he salido de fiesta, sí he usado faldas cortas, como la gran mayoría por no decir que todas las niñas de mi edad, ¿por eso me van a juzgar?, ¿por eso me lo merecía?, ¿por eso pasó lo que pasó?, ¿por andar de noche con mis amigas? Pregunto a aquellos que criticaron e hicieron páginas para atacarme, entonces yo les pregunto, ¿por qué?… Digo, ya que al parecer ustedes creen que son ‘jueces’ de lo que sucedió”.
La indignación pública ha crecido exponencialmente por: a) el coche Mercedes Benz que uno de los agresores recibió de su familia; b) amenazas telefónicas a la familia de Daphne: “¿quiere que le llevemos la cabeza de su yerno?”,  susurran a la abuela; c) el fiscal Luis Velazco Bravo requiere pruebas periciales que se antojan absurdas, a un año de los hechos, mientras enfatiza que d) una disculpa en vídeo y la aceptación de la culpa (de dos acusados) no prueba nada. 
Así las cosas: hay valor frente el atropello. Pero el tiempo todo lo cubre con un manto de olvido. Veremos si el tiempo es otra vez ‘juez’, mientras la sociedad se manifiesta en las calles de Veracruz.
AL MARGEN
ESTÁN muy adelantados lo tiempos electorales en el PRD tabasqueño, se dijo luego de que el dirigente José Rueda enlistó a los presuntos aspirantes a la candidatura al gobierno estatal por ese partido. Mencionó a Raúl Ojeda, José Antonio dela Vega, Juan Manuel Fócil, Oscar Cantón  Jaime Mier. Faltaron por supuesto Fernando Mayans y Gerardo Gaudiano, entre otros. Consiguió reflectores. ( Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla )
 
 

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