Escala Crítica/Columna diaria
*Se pone a prueba la capacidad de la estructura lopezobradorista
*Su verdadero objetivo son las presidenciales, pero necesita recursos
*Ajustes en gobierno: recortes presupuestales y evaluación de resultados
Víctor M. Sámano Labastida
ASÍ COMO los partidos Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD) tienen un serio desafío en las 14 elecciones de este año (doce para gobernador), el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) pondrá nuevamente a prueba su capacidad para organizar a sus bases, controlar sus conflictos internos y superar los obstáculos de un partido en construcción, declarado abiertamente de oposición. El paso de “movimiento” a “partido”; ese salto de contar con un líder nacional ampliamente conocido y capaz de llenar plazas, a los resultados en las urnas.
Con todo y que puedan quejarse del “complot” de sus adversarios, los morenistas tienen que afinar herramientas para la contienda que verdaderamente les interesa: la de Presidente de la República en el 2018, con Andrés Manuel López Obrador como candidato.
Por lo que toca al PRI –ya me he referido a este partido y los comicios en una pasada colaboración- obtuvo la mayoría en 2010 en nueve de los doce estados donde se votará por gobernador, pero en varias de esas entidades sus bonos han disminuido como es el caso de Veracruz. La posición de Javier Duarte, actual gobernador, aparece insostenible.
Habrá que recordar que en el 2010 el PRI perdió tres estados, en los que era invencible, como resultado de una alianza PAN-PRD (Oaxaca, Puebla y Sinaloa); otros dos de los triunfos del tricolor en aquella ocasión fueron muy apretados: Aguascalientes y Durango. Ya habrá oportunidad de referirnos a la competitividad del PAN que esta vez va aliado con los solaztequistas en cinco entidades (Oaxaca, Veracruz, Quintana Roo, Durango y Zacatecas)
ESTRENANDO PARTIDO
HAGAMOS por hoy un acercamiento al factor Morena, partido fundado por López Obrador en el 2014 y que participó en sus primeras elecciones el año pasado, tanto federales como nueve comicios para gobernador. Mientras que en la contienda por las diputaciones federales el partido lopezobradorista tuvo en 2015 buenos rendimientos (aunque esperaban más), en las votaciones para gobernador y presidentes municipales no le fue tan bien.
En 17 estados, Morena se colocó en los comicios federales por encima del PRD y una sorpresa fue que se ubicara como segunda fuerza electoral en Quintana Roo, donde esta vez habrá comicios para gobernador.
Pero le decía que en la disputa por las nueve gubernaturas en el 2015, el debut de los lopezbradoristas mostró sus limitaciones organizativas (también obstáculos institucionales y de “la mafia en el poder”). Pero podría llevar a conclusiones equivocadas si se cree que lo obtenido en los comicios locales es un indicio de lo que sucederá en el 2018. Ya hemos comentado que López Obrador ha sido en 2006 y 2012 un fenómeno electoral en cuanto a captación de votos.
¿Qué sucedió en las votaciones del 2015 en nueve estados con Morena? Aunque, como le decía, el partido lopezobradorista salió más o menos bien librado en los resultados federales, en la disputa por las gubernaturas y tomando en cuenta los resultados habría motivos de preocupación para ese partido: sólo en Campeche donde ganó el PRI, los morenistas llegaron al 17.82% de los sufragios, dejando al PRD con apenas 1.93%.
Otros estados donde Morena superó los cinco puntos porcentuales fueron Querétaro (5.63%) y Baja California Sur (6.41%); en Michoacán más de tres pero menos de cinco (3.83%). En esas cuatro entidades obtuvo su registro estatal (ya tiene el nacional) y sus prerrogativas, lo que no sucedió en Guerrero, Sonora, Colima, San Luis Potosí y Nuevo León, donde no llegó al mínimo del 3%.
Claro que el PRD salvo el triunfo de Michoacán, su posición competitiva en Guerrero colocándose en segundo lugar de la votación y en San Luis Potosí, también perdió el registro estatal en Querétaro, Colima y Campeche. En el caso de Tabasco, con las elecciones municipales y para diputado federales, estos dos partidos no tuvieron problemas para refrendar su registro.
LA FUERZA DEL PERSONAJE
LE DECÍA líneas arriba que si bien son importantes para Morena los resultados en la contienda por las gubernaturas –como para cualquier partido-, porque además les asegura recursos estatales, esto no debe engañar sobre las expectativas de ese partido para el 2018: Andrés Manuel es casi seguro que esté en las boletas y esto cambiará la correlación de fuerzas. Está demostrado que el tabasqueño es altamente redituable para el partido que lo postule en términos de votos: viene con un promedio de 15 millones de sufragios. Se calcula que por militante que declara el partido que lo cobija (como ocurrió con el PRD), AMLO multiplica por cuatro el rendimiento. En el PRI apenas es dos por uno.
En particular se prevé que el llamado “Efecto Obrador” se refleje en el 2018 también en las votaciones estatales de la Ciudad de México y Tabasco, donde la ascendencia de AMLO es innegable.
Resulta imprevisible el desempeño de Morena en junio próximo, porque en sentido estricto son sus primeras elecciones estatales en las nueve entidades. Como referencia podemos tener los resultados de las federales del 2015, habiendo presentado el lopezobradorismo un buen desempeño en Puebla, Hidalgo, Tlaxcala, Veracruz y Quintana Roo. Aunque también por razones afectivas, históricas y simbólicas, AMLO le apuesta a arraigarse en Oaxaca.
AJUSTES, ENROQUES
EN ESTOS días y las siguientes semanas seguramente se confirmarán una serie de decisiones, ajustes, reacomodos, en el gabinete de Arturo Núñez. Algunos como resultado de las evaluaciones de desempeño, otras por las exigencias del recorte en el presupuesto (hay que hacer más con menos), algunas por decisiones personales, a las que se suman respuestas a reclamos de la sociedad. En fín, varios factores en los que resulta determinante la decisión de quien lleva el timón.
Donde ya se comenzaron a ver movimientos es en la Secretaría de Gobierno. Ahí, fue designado un encargado de despacho (Gabriel Bonilla) ante la renuncia de Dora Nelly Martínez en la Subsecretaría de Desarrollo Político; pero también hay ajustes en la Subsecretaría de Trabajo, que al parecer será convertida en Dirección como parte de un programa de compactación de dependencias. Se da por hecho que el titular de la dependencia, Raúl Ojeda cumplirá su anuncio de retiro temporal. Los nombres de Francisco Peralta y Humberto de los Santos son mencionados reiteradamente en los medios.
Esta misma semana se esperan importantes anuncios en el gabinete de Seguridad Pública. (
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