Escala Crítica/Columna diaria
*Desde 2011, Centro y Cárdenas ya eran motivo de preocupación
*El origen de los delincuentes en el país se concentra 7% de colonias
*Festival de la Jaiba, una interesante iniciativa ciudadana comunitaria
Víctor M. Sámano Labastida
EN MARZO de 2013, el entonces subsecretario de Prevención de la Segob, Roberto Campa Cifrián anunció el Pronapred (Programa Nacional de Prevención del Delito). Derivado de los registros de años anteriores (2011-2012), el gobierno federal incluyó al municipio de Centro, Tabasco, entre las 57 demarcaciones del país con el mayor índice de violencia. La historia no es nueva. El crimen viene de mucho antes.
En la más reciente reunión de los gobernadores y Miguel Osorio Chong (Segob), la capital tabasqueña quedó entre las 50 ciudades en las que se aplicará un programa especial.
Más bien podría decirse que se reforzarán y se vigilará la efectividad de las acciones anunciadas desde hace más de tres años. Porque en 2013, el gobierno de Enrique Peña Nieto se comprometió a realizar un diagnóstico y aplicar un programa especial en cada caso.
MUCHO RUIDO, MAGROS RESULTADOS
EN AQUEL TIEMPO según Campa Cifrián, se realizarían acciones para prevenir la violencia en 346 colonias y algo que denominaron “polígonos”, identificados unos 250. Dijo que “todas las secretarías tendrán acciones focalizadas” en los estados donde se detectaron riesgos. Tres de las áreas en las que se aplicarían “acciones especiales” del 2013 son Las Gaviotas y La Manga (Centro), y Los Cañales (Cárdenas). En aquel listado, Centro aparecía en el lugar 48, como zona de riesgo. ¿Qué tanto se avanzó?, porque se trataba de una labor conjunta de las autoridades federales, estatales y municipales.
Un reporte del 21 de abril de 2014 en el diario La Jornada ofreció un balance nada optimista: “Durante el primer año de aplicación del Programa Nacional para la Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia, la tasa de homicidios dolosos se incrementó en nueve entidades y en las restantes 23 reportó reducción en este indicador”.
En 2013, los secuestros tuvieron un registro extraordinario: mil 702 plagios, sin contar los casos no denunciados y que se conocen como cifra negra. El robo de vehículos con violencia llegó a más de 50 mil denuncias, y el restante robo de automóviles (sin violencia) llegó a 130 mil expedientes. En total, 180 mil en un año en el país.
Para el 2014, nueve zonas fueron incorporadas a las 57 iniciales: dos de Michoacán, una de Tamaulipas, tres de Chihuahua, tres delegaciones de la Ciudad de México, una de Sinaloa y una de Hidalgo. Por Tabasco fue añadido el municipio de Cárdenas, que según la información más reciente ya no está contemplado, porque las 66 que ocupaban el interés de la Segob este año fueron reducidas a 50. Del listado salió Cárdenas, a pesar de que es el segundo municipio con incidentes criminales en el estado, después de Centro.
APLICAR BIEN LA MEDICINA
DE ACUERDO a los responsables del Pronapred, se aplicaría una denominada “acupuntura socio urbana” que incluye no sólo la acción directa para combatir y perseguir los delitos, sino sobre todo el rescate de los espacios públicos, equipamiento de edificios, proyectos urbanos, promoción de nuevas pautas y hábitos de convivencia, cooperación y solidaridad. Lo que en otros sitios se ha denominado también una cultura de la paz.
Más allá de los conceptos y propósitos que pueden quedar en el papel, se identifican acciones concretas como detectar qué zonas tienen mayor incidencia delictiva y también no sólo dónde ocurren los delitos y hechos de violencia, sino de qué barrios, villas, comunidades provienen el mayor número de reos jóvenes.
En un reporte de julio de 2014, la Secretaría de Gobernación indica que un total de 3 mil 234 colonias del país eran generadoras de violencia (o de delincuentes), datos obtenidos con el seguimiento del historial de presos a escala nacional. En el país hay 45 mil 262 colonias, lo que quiere decir que el problema se concentra en el 7% de los asentamientos. Como ejemplo de que no todo el país está bajo el dominio criminal, se pudo observar que los delincuentes provenían en su mayoría de sólo 95 de los dos mil 440 municipios de México.
El mayor número de “colonias de riesgo” están en Michoacán (412), luego Chihuahua (229) y Jalisco (207). ¿Qué sucede en Tabasco según los datos oficiales? Que son 13 colonias (de Centro y Cárdenas) de donde provienen la mayoría de los delincuentes.
Como le decía, en la más reciente evaluación de la Segob y los gobernadores, la lista de focos de atención se redujo a 50. Cárdenas, Tabasco, quedó fuera, aunque la incidencia de delictiva tiene hondas raíces. Recordemos que en el 2011 el entonces gobernador Andrés Granier Melo llegó al extremo de declarar: “Estamos en guerra contra el crimen organizado (…), no vamos a entregar la plaza”. (Cárdenas, Tabasco, 20 de mayo 2011).
En aquellos tiempos, los pobladores de Cárdenas hablaban de que allí se vivía una especie de “toque de queda” impuesto por el crimen. La población no podía salir de sus casas después de las 21:00 horas. Es un tema que no se agota y volveremos a la cuestión.
UNA ACCIÓN CIUDADANA
A INVITACIÓN de un grupo de la sociedad civil acudimos el fin de semana al Tercer Festival de la Jaiba, realizado en Villa Cuauhtémoc, Centla. Esta acción tiene especial relevancia porque fue organizado “desde abajo”. En efecto, un microempresario restaurantero decidió darle continuidad a una convivencia gastronómica que inició hace tres años.
Este año la falta de recursos lo puso en riesgo, así como los obstáculos que le imponía la alcaldesa de aquel lugar. El señor Adán Tejeda encontró la colaboración del chef Jesús Hernández y de la maestra Teresita de Jesús Bautista, así como de la Universidad Intercultural de Oxolotán por medio del coordinador Eliseo Hernández. Este grupo se dio a la tarea de recabar apoyos entre amigos y conocidos; el resultado fue un éxito: una tonelada de jaiba se ofreció gratuitamente a los asistentes.
Pero no sólo eso, a este significativo Festival acudieron artesanos de varios municipios, personas dedicadas a elaborar dulces, conservas, frituras, muebles, a nivel familiar. Como lo pudo constatar el titular de la SDET, David Gustavo Rodríguez quien acudió a inaugurar el evento, este encuentro cumplió su cometido: ser un encuentro netamente popular, comunitario, de impulso a la economía local. Se comprometió a apoyar los subsecuentes festivales e integrarlo a la ruta de la oferta turística que ofrece el estado. Por cierto, el titular de SDET tiene raíces centlecas.
AL MARGEN
Mañana le comento sobre Mancera, Núñez y Gaudiano, en la visita sabatina.
