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Home Escala Crítica PERDER EN PENALES: NARCO HISTORIAS;DEL ERROR AL TERROR, PAÍS DE SOMBRAS

PERDER EN PENALES: NARCO HISTORIAS;DEL ERROR AL TERROR, PAÍS DE SOMBRAS

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 Escala Crítica/Columna diaria

*“Campo de exterminio” en Coahuila; indiferencia ante la muerte
* Política y crimen organizado, delito institucionalizado, herencias 
* Reclusión de El Chapo: Osorio ‘aprendió’; Jalisco, raíces del negocio
         
Víctor M. Sámano Labastida
             
MÉXICO se ha convertido en el país de los horrores, le decía ayer. Organizaciones civiles dicen haber encontrado en un predio de Coahuila más de 3 mil fragmentos óseos que inicialmente estiman que corresponden a unos 600 cuerpos humanos asesinados recientemente. Tanto el gobierno de Coahuila como las autoridades federales rechazan que haya tal cantidad de cadáveres Anuncian que investigarán. Grave, muy grave que hasta ahora se conozcan testimonios de masacres ocurridas en el 2011, por lo menos.
De impacto mundial fue el hallazgo de una fosa común clandestina en San Fernando, Tamaulipas, con más de 192 cadáveres de hombres y mujeres, la mayoría emigrantes centroamericanos. Ahora se informa de uno de los “campos de exterminio” más grandes del país y quizá del mundo.
Cuando se habla de estas masacres y de los secuestros masivos o selectivos (mal llamados levantones), de inmediato se mira hacia la difusa “delincuencia organizada”. 
 
UN CABALLO DE TROYA
EL NARCOTRÁFICO en México es herida que supura en varias direcciones. Contamina los sueños de jóvenes que deslumbrados se suben a la autopista del crimen; contamina la política y sus reglas, con negociaciones inconfesables e intercambio de favores por debajo de la mesa; contamina la economía, alimentada por el lavado de dinero, caballo de Troya multiplicado por hombres de cuello blanco; contamina la cultura, que celebra acciones del crimen organizado en corridos que son marketing y persuasión popular. Contamina los derechos humanos, con polémicas para su aplicación.
El narcotráfico, en suma, contamina el entero cuerpo social. En algunas regiones, forma parte de ese cuerpo. Y no se retirará, luego de 70 años de avance, en el tránsito del México rural hacia el México urbano, años 40s y 50s del siglo XX, según menciones de prensa a ‘crimen organizado’, ‘bandas criminales’ y ‘grupos de delincuentes’, (UNAM 2013: “Orígenes del crimen organizado en México”). Si se observan los períodos sexenales, se ve que el narcotráfico llega sólo después de Lázaro Cárdenas. No parece casualidad, por el cambio de modelo desarrollista: del campo a la ciudad. El primer Presidente civil (no militar) del régimen posrevolucionario, Miguel Alemán Valdés (1946-1952), desarrolla la industria pero también en su sexenio se siembra la circulación de ilegalidades que activan la noción de crimen organizado. La herencia del antiguo régimen también tiene esa vertiente.                
EL CHAPO: SILENCIO Y RECLUSIÓN   
Cualquier seguimiento mediático de dos o tres meses, muestra un panorama inquietante: el pasmo ante algunos temas que requieren visibilidad y reflexión. El silencio resguarda impunidad. Se ha planteado aquí que el periodismo olvida el contexto por el ‘instantaneísmo’ y el corto plazo. La velocidad de la cobertura olvida la complejidad de los hechos y las posibles relaciones con otros aspectos de la vida pública. Por ejemplo, realice el lector el siguiente experimento: ubique declaraciones de políticos priístas sobre la segunda fuga de El Chapo. Le sobrarán dedos de una mano. Casi nadie dijo pío, obvio, mientras Peña Nieto y Osorio sudaban. En cambio, ubíquese el momento en que fue recapturado. Le faltarán manos: hay coro y orquesta. Ésa es la forma en que un sistema político arropa y resguarda a los jefes, pero eso no contribuye a la racionalidad de la opinión pública.   
En el caso de Joaquín Guzmán, se observa que la prensa lo coloca ya en segundo plano. ¿Qué pasa con su reclusión, luego de su recaptura? Fruto de una zambullida en Internet, los datos más relevantes son los siguientes:     
-Desde mayo de este año fue trasladado al Penal de Ciudad Juárez Chihuahua, Centro Federal de Readaptación Social #9.
-La Comisión Nacional de Seguridad, que depende de la Secretaría de Gobernación, tiene destinados a 75 efectivos para su vigilancia permanente. Los custodios de Guzmán están encapuchados para que no los identifique ni existan acercamientos o amenazas. Es obvio que el presidenciable Miguel Ángel Osorio Chong aprendió la lección de la segunda fuga. 
-Los reos tienen prohibido dirigirle la palabra. En junio, un celador perdió su empleo al ser sorprendido en charla con El Chapo. No es casualidad que su abogado haya interpuesto una demanda por violación de derechos humanos. 
-El Chapo ha recibido 34 visitas familiares y le han practicado 109 chequeos médicos. Se dice que su estado de salud es óptimo, con un peso de 75 kilos, hace caminatas en el interior del penal y mira una hora la televisión. Se le permite jugar ajedrez, aunque de forma computarizada. 
-La extradición de El Chapo a EEUU se detuvo, por una petición de amparo ante la justicia mexicana. Valga decir: mientras el gobierno mexicano deshoja la marihuana, es evidente que El Chapo no quiere pisar Estados Unidos. Ahí la DEA lo ubica en plena competencia por el mercado de la heroína y le tiene unas cuantas preguntas reservadas.                    
LA ENTREVISTA A CARO QUINTERO
El semanario PROCESO estrenó en el mes de julio su espacio televisivo en Internet. Se transmitió una polémica entrevista con el ‘decano del narcotráfico en México’, Rafael Caro Quintero, quien salió por su propio pie de la cárcel (orden de un juez) y ahora es buscado otra vez por la justicia mexicana. Kafka puro. Proceso logró esa entrevista con la reportera Sanjuana Martínez, y un dato brillaba: la extraña moción de paz que hizo Caro Quintero a El Chapo Guzmán. Como en la ocasión que Julio Scherer entrevistó en la clandestinidad a Ismael El Mayo Zambada (2008), hubo mensajes cifrados, para leer entre líneas. Al parecer, Caro Quintero buscaba pactar un reacomodo de los cárteles, metiendo a Jalisco en la órbita del cártel de Sinaloa, o por lo menos sugiriendo un pacto de no agresión. Un cártel emergente y poderoso, con armas que derriban helicópteros, es Jalisco Nueva Generación, del cual Caro Quintero no tiene control. Y Jalisco es su territorio natural. Así pues, el reacomodo de cárteles con nuevas caras en la mesa opera en las barbas del Estado Mexicano, a través de un ‘decano’ que fue soltado por el mismo Estado Mexicano. La contaminación continúa.  ( Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla )
 
 

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