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*Quintana Roo, Coahuila y Chihuahua deben todo su presupuesto

*Tenemos finanzas sanas, dice Amet Ramos; los menos endeudados

*La gobernabilidad y la seguridad pública, un diálogo con G Rosario

 

Víctor M. Sámano Labastida

 

EL GOBIERNO de la República y varios estados viven el grave problema de los endeudamientos. Hay entidades que deben más del 250 por ciento de sus participaciones federales como Quintana Roo y Coahuila; o también que tienen que destinar más del 90 por ciento de sus ingresos al pago de los empréstitos (capital e intereses), como es el caso de los estados mencionados, pero también de Nuevo León y Chihuahua que utilizarán más del 70 por ciento de sus ingresos para ese fin.

En una entrevista reciente con el secretario de Finanzas de Tabasco, Amet Ramos Troconis, indicó que la actual deuda de la entidad es de unos 6 mil millones de pesos y que se pagan anualmente 600 millones de pesos. Sostuvo que los débitos de Tabasco son de los más bajos en el país; de hecho, se sabe que en este sexenio sólo ha habido dos solicitudes de crédito: uno para renegociar un préstamo de la administración anterior y evitar gravosos pagos, y el otro para atender las necesidades del nuevo sistema de justicia penal.

Se registran casos extremos en donde el monto de los adeudos obligó a paralizar las administraciones que no tenían ni para pagar la nómina como sucedió en Acapulco, Guerrero. Situaciones más graves se presentaron en pequeñas alcaldías que simplemente tuvieron que cerrar sus puertas por falta de dinero: Paso del Macho, San Andrés Tenejapan, Huayacocotla, en Veracruz; Acuitzio, Erongarícuaro, Michoacán; San Fernando, Tamaulipas, por sólo citar algunas. 

En otras situaciones, los alcaldes y hasta los gobiernos estatales han cerrado algunas oficinas, despedido personal o reasignado a otras tareas. Sucedió entre 2009 y 2012 en municipios tabasqueños. Nos confiaba un diputado que hay alcaldes que “ya quieren salir corriendo”, porque el acceso al presupuesto público no es lo que imaginaron.

 

LO QUE DUELE ES PAGAR

COMO usted habrá leído o escuchado, uno de los principales problemas del país y de los estados es precisamente la falta de recursos. Más aún ahora con los anunciados recortes presupuestales. Una falta de dinero agravada por la creciente deuda pública. Como sucede en las familias, en la medida en que aumenta la deuda o los créditos bancarios, cuesta más trabajo obtener nuevos préstamos. Y las préstamos que se obtienen son más caros. Además, a la larga significan un riesgo de perder la independencia y las propiedades.

Para que tengamos una idea de lo que significa que Tabasco tenga una deuda de 6 mil millones, algo así como el equivalente al 15 por ciento de su presupuesto total, le comento que Veracruz debe pagar a los bancos unos 60 mil millones de pesos. Hay otras entidades que deben también enormes cantidades como Quintana Roo, Coahuila y Chihuahua.

Le decía líneas arriba que Quintana Roo es uno de los estados más endeudados si tomamos en cuenta la relación entre sus préstamos y su presupuesto anual: debe 251 por ciento de las participaciones federales. Coahuila debe 237 por ciento y Chihuahua un 212 por ciento. Esto es que tendrían que destinar la totalidad de su presupuesto de más de dos años para cubrir lo que deben. Esto sin contar con que mientras mayor sea la deuda los intereses se disparan.

En diversos comparativos observamos que si cada quintanarroense tuviera que aportar para pagar la deuda de su estado tendría que desembolsar 14 mil 669 pesos, en tanto que en Coahuila serían 12 mil 991 pesos, en Nuevo León 12 mil 731 y en Chihuahua 11 mil 614 pesos. Son los más endeudados.

 

En sentido estricto, hay estados que deben todo el presupuesto anual y más; en algún momento entrarán en una verdadera crisis que obligará a parar la administración pública, despedir personal. Paralizar el gobierno. Esto, le decía, no es ficción porque ya ha sucedido en pequeña escala.

Afortunadamente no es el caso de Tabasco. Aunque otro debate es si resulta conveniente no utilizar la capacidad crediticia para tratar de abrir opciones al desarrollo. Aunque grupos empresariales sostienen que los préstamos podrían ser una salida, el propio gobernador Núñez ha dicho que por el momento no tiene previsto recurrir a los bancos. En tanto que Amet Ramos afirma que el control de la deuda es uno de los factores –no el único- que permite a Tabasco estar entre los ochos estados del país con finanzas sanas. Otro es el tema de los efectos que podrían tener los recortes presupuestales a nivel federal.

 

GOBERNAR Y PROTEGER

 

EN EL AÑO 2012  hubo un hecho histórico en Tabasco: por primera vez cambió la coalición partidista que encabezaba el Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el gobierno para dar paso a una coalición encabezada por el Partido de la Revolución Democrática. Se rompió esa especie de empate que se mantenía desde el años 2000, cuando tuvieron que anularse los comicios ante las dudas sobre el resultado.

En el 2015 tuvo el estado elecciones intermedias y nuevamente observamos un cambio en la relación de fuerzas políticas. El PRI dejó de ser hegemónico, el PRD mantuvo su mayoría, y dos partidos avanzaron, Morena y el PVEM, éste último de manera sorpresiva. Aunque explicable por el traspaso de líderes y votos desde el tricolor.

Al mismo tiempo a partir del 2013 –con el nuevo gobierno- diversas fuerzas se movilizaron y tomaron las calles y las tribunas, por los más diversos motivos. Maestros, médicos, policías, transportistas, pobladores.

Una tarea de la Secretaría de Gobierno, según el mandato de la ley, es promover el diálogo y el acercamientos entre las autoridades estatales y los diversos grupos sociales, políticos, económicos, para garantizar la estabilidad. Pero también la seguridad como parte de la gobernabilidad.

En algún momento de la historia, no sólo de Tabasco sino de todo el país, los asuntos que tienen que ver con el combate y prevención de la delincuencia se convirtieron en parte de las tareas para ofrecer el necesario orden y garantizar a la gente condiciones para desarrollar sus labores.

AL MARGEN

SOBRE este y otros temas platicamos anoche con el titular de la Segob tabasqueña, Gustavo Rosario Torres en una entrevista para la radio y la televisión en la que me acompañaron Víctor Ortiz y Yaditzy Valencia. El diálogo “Tabasco en la Ruta” se transmitió por Canal Siete y Radio Tabasco.

Hoy estará en los estudios de la Corat el titular de Desarrollo Económico, David Gustavo Rodríguez. ( Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla )