Escala Crítica/Columna diaria
Víctor M. Sámano Labastida
QUE EL PRI vuelva a gobernar una entidad que había perdido o que sea derrotado en una plaza en la que siempre había sido victorioso, forma parte de la “normalidad democrática”. Actualmente se habla de la posibilidad de que el tricolor recupere la Presidencia o que el lopezobradorismo desplace al PAN. Hay localidades, inclusive, en las cuales el poder pasa de un color a otro: PRI, PAN o PRD. Otras, muy pocas, en donde la fuerza dominante llegó a ser Convergencia, o algún partido regional.
A nivel de gobiernos estatales quedan pocas entidades de la República donde la oposición no ha logrado desplazar al PRI. Aunque se puede observar que la denominada alternancia –un partido por otro-, se instala primero en los municipios y en las grandes ciudades. Tabasco es una de las entidades donde el tricolor es la fuerza dominante a nivel estatal, pero con relevos partidistas en 15 de los 17 municipios.
Ayer, el aspirante del PRI con mayor experiencia en cargos públicos, Humberto Mayans Canabal, anunció su retiro definitivo de la contienda por la nominación tricolor. En julio había denunciado la existencia de “intereses mezquinos decisorios” que lo llevaron entonces a decidir que no participaría en el proceso interno de es partido.
LAS HOJAS DEL CALENDARIO
SIN EMBARGO, la posibilidad de que mediante una alianza el PRI pudiera aligerar las tensiones de sus aspirantes internos, así como de una intensa negociación con la dirigencia nacional tricolor (en ese tiempo a cargo de Humberto Moreira), reavivó el ánimo de quienes habían trabajado por la candidatura de Mayans Canabal.
El tiempo se según el ex secretario de Gobierno. Y, desde su perspectiva, también la marcha del calendario implicaba serios riesgos para el tricolor. Dijo ayer: “El proceso para elegir candidatos al Gobierno del Estado, así como regidores y diputados locales en mi Partido Revolucionario Institucional se ha prolongado por demasiado tiempo y en consecuencias se ha suscitado una serie de golpes bajos, guerra de guerrillas entre algunos contendientes y provocadores profesionales”.
Estas acciones negativas –apuntó- “amenazan con enfrentar y dividir a nuestra organización política, y lo más importante en estos momentos para el PRI es garantizar la armonía, la solidaridad y la unidad indispensable para enfrentar con éxito los dos procesos que simultáneamente celebraremos en Tabasco, el federal y el local”.
Mayans Canabal no es el único aspirante que refiere públicamente la existencia de una “guerra sucia”, de golpes bajos entre y contra los aspirantes priístas. Hasta el miércoles eran diez los pretendientes. También Luis Felipe Graham, Jesús Alí, Evaristo Hernández y Georgina Trujillo, señalaron –con matices diversos- la presencia de campañas de descalificación. Prácticamente todos los aspirantes priístas en su momento pidieron establecer “pactos de civilidad”, a la par de las normas escritas ya existentes pero que no bastan en condiciones de alta competencia interna…y externa.
Dijo ayer Mayans Canabal: “las dos prioridades (del tricolor) son garantizar el triunfo de Enrique Peña Nieto para recuperar la Presidencia de la República y con ello refundar a la nación, y refrendar como lo hicimos en el 2006 el triunfo a la gubernatura, diputaciones y alcaldías”. Son dos grandes objetivos, sostuvo el ahora ex aspirante al gobierno estatal, que no se deben poner en riesgo “por intereses personales o de grupos”.
En julio pasado (11/VI/2011), el ex secretario de Gobierno ya había percibido los conflictos internos en el tricolor. Hay –señaló- “intereses mezquinos decisorios que obstaculizan con determinación esa posibilidad (de ser candidato) y rompen con la armonía y la unidad indispensables que se requieren para enfrentar con éxito los procesos electorales y posteriormente gobernar con eficacia y unidad al Tabasco de hoy”.
DESHOJANDO LA MARGARITA
HACE CASI seis meses consideró que las circunstancias lo orillaban a “comunicar mi determinación de no participar en el proceso interno”, del PRI. Este 22 de diciembre resolvió que se abstendría de participar en la contienda para obtener la candidatura del tricolor “en aras de garantizar la concordia, la armonía y la unidad de mi organización política”.
Ayer, los aspirantes a la candidatura del PRI para el gobierno estatal –ocho de ellos-, acudieron a una reunión en la Ciudad de México con el dirigente nacional Pedro Joaquín Coldwell –quien sustituyó a Humberto Moreira hace unos días-; como lo han hecho o lo harán los pretendientes a las gubernaturas que estarás en disputa el uno de julio. Los participantes en el encuentro en la capital del país, entre ellos Georgina Trujillo, se dijeron “muy satisfechos” de los términos del diálogo con la nueva dirigencia. Las posibilidades y las fichas se reacomodan.
Trascendió antes que el PRI tabasqueño tenía programada ya una reunión de su Consejo Político para el 27 de diciembre, e inclusive se daba por hecho que estaba definido el método de selección del candidato de ese instituto. Será por medio de una asamblea de delegados compuesta por unos 560 miembros, se dijo en medios periodísticos. El vocero del tricolor, Fernando Valdez, aseguró que no se reunió la Comisión Política Permanente de su partido y por lo tanto no había decisiones en ese sentido.
Pero no es sólo la selección del candidato a la Gubernatura. Casi a la par, el tricolor debe depurar el larguísimo listado de sus aspirantes a las alcaldías –digamos que en promedio diez por municipios- y a las diputaciones federales y locales, y a las senadurías. Con la limitación de que varias de esas posiciones fueron cedidas a los partidos Verde y Nueva Alianza en las negociaciones encabezadas por el anterior dirigente Humberto Moreira.
Cabe recordar que aproximadamente el 40 por ciento de las posiciones en disputa para el 2012 fueron cedidas por el PRI a los minipartidos. Pero el PVEM y Panal, visto en perspectiva, también podrían ser parte de los damnificados con la llegada de Pedro Joaquín Coldwell y el retiro de Moreira.
AL MARGEN
Mientras, los aspirantes de la coalición lopezobradorista a las diputaciones federales y senadurías iniciaron sus precampañas con miras a las encuestas que ese frente aplicará la segunda semana de enero. Los tiempos corren y, como decía el desaparecido Héctor Argüello, “los de atrás se quedarán”. (
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