Escala Crítica/Columna diaria
*En confluencia de Chiapas y Veracruz, PRI contra PRD
*Desde finales de los noventas, una alta competencia
*Confusiones en las boletas; estudiantes ganan debate
Víctor M. Sámano Labastida
RECIENTES imágenes nos muestran a los candidatos de los dos partidos con mayor presencia en Tabasco, PRI y PRD, en grandes manifestaciones en la ciudad de Huimanguillo, el municipio geográficamente más extenso del estado y cuarto en población, apenas superado por Centro, Cárdenas y Comalcalco. Se puede prever ahí una elección muy competida entre el ganadero Dagoberto Lara Sedas por el tricolor y Francisco Sánchez Ramos, ex dirigente estatal de los solaztequistas.
Ese municipio conoce lo que se denomina como alternancia, puesto que ha sido gobernado por el PRD en dos trienios seguidos después de una larga historia de gobiernos priístas: el de Walter Herrera Ramírez (2004-2006, alcalde asesinado casi al término de su mandato) y el de Oscar Ferrer Abalos (2007-2009); recuperado por el PRI en los comicios del 2009 con Gerald Washington Herrera.
VAIVENES ELECTORALES
EN ESA DEMARCACIÓN, la presencia del PRD ha sido constante desde principios de los noventas, pero el PRI también la tenía como una de sus más importantes reservas del “voto verde”. En esa plaza, estratégica por su ubicación –limita con Chiapas y Veracruz, es además ruta hacia el sureste-, el PAN tiene una presencia limitada y sólo repuntó en 2003 y 2006.
Un breve repaso de la más reciente historia electoral, nos indica que en Huimanguillo cualquiera de los partidos que se han relevado en el poder puede triunfar: el PRI con Lara Sedas o el PRD con Sánchez Ramos.
En el 2000, Acción Nacional logró hasta el 22% de la votación (10 mil 547 sufragios), y en el 2006 hasta el 28% (17 mil 709 sufragios), pero sus registros históricos se han mantenido por abajo del 10%.
En cambio tanto el PRI como el PRD mantienen una alta capacidad competitiva. En 1997 el tricolor mantuvo la alcaldía con 23 mil 856 votos, frente a 20 mil 053 del PRD; logró refrendar su presencia en el poder municipal en el año 2000 con 18 mil 097 votos frente a 15 mil 544 del PRD. Como se puede observar los dos partidos perdieron simpatizantes entre una elección y otra, porque un segmento se temporalmente con el candidato panista.
En el 2003 los solaztequistas aprovecharon una serie de rupturas en el tricolor y con un militante surgido de las filas del partido gobernante (Walter Herrera) derrotaron al PRI: 29 mil 204 votos contra 24 mil 239. A pesar de ser elecciones intermedias, esto es que no se elegía a gobernador, la presencia de los ciudadanos en las urnas tuvo un crecimiento notable.
Contrariamente, en el 2006 en los registros oficiales tanto el PRI como el PRD cayeron en sus votaciones, pero la victoria fue para los solaztequistas: 21 mil 204 contra 19 mil 581. Una de las explicaciones sería la fuga de votantes hacia el abanderado panista y conocido militante priísta y ex alcalde César Ernesto Rabelo. La victoria fue para el perredista Oscar Ferrer.
En el 2009 se repitió el fenómeno del incremento de la votación en elecciones intermedias para los dos partidos dominantes. El PRI, con Washington Herrera obtuvo 30 mil 364 sufragios contra 27 mil 392 del PRD encabezado por Francisco Sánchez, quien ahora es nuevamente candidato.
En aquella elecciones de hace tres años, el PRD se presentó dividido y cerca de 5 mil votos se los llevó su cambiante aliado, el Partido del Trabajo. Este año, el partido que muestra una división en la clase política gobernante de esa demarcación es el tricolor, de donde emigró la ex diputada María Estela de la Fuente. Los portavoces priístas rechazan que esa fuga pueda representar un riesgo; mientras que los perredistas sostienen que este año presentan una unidad que no tuvieron en 2009. ¿Qué se pelea con tanto interés en Huimanguillo?
VAN POR LO SUYO
LOS INSTITUTOS electorales, encargados de organizar y conducir las votaciones del uno de julio, deberán realizar una intensa campaña de promoción del sufragio. No sólo para que un mayor número de personas vayan a las urnas, sino también para evitar confusiones. Este año se realizarán, por lo menos en los casos también hay comicios locales, seis elecciones el mismo día.
Esto sin contar a los llamados plurinominales, aquellos que llegan por voto indirecto.
Los votantes deberán elegir a quienes vayan a despachar en seis cargos públicos: en la Presidencia de la República, en la senaduría y en la diputación federal. En el caso de la Cámara Alta se tendrá que votar por una fórmula de dos aspirantes, aunque al final son elegidos tres senadores por estado.
Por lo que toca a las elecciones estatales, se votará en Tabasco por gobernador, presidentes municipales y diputados locales. A los electores les entregarán seis boletas.
Seguramente una gran mayoría de quienes acudan a las urnas definirán su voto por partido, pero otros lo harán por el candidato o los candidatos.
Aunque hay siete partidos, en realidad existen para estas elecciones cuatro fuerzas políticas a nivel federal y tres a nivel estatal. Una encabezada por el PRI, otra por el PRD y una más por el PAN.
Sólo a nivel de elecciones federales otro partido irá solo, el Nueva Alianza, el cual para las votaciones estatales sí va en coalición con el PRI.
Deberá lograrse que la abstención sea menor al 40%, pero también evitar confusiones que lleven a anular el voto. En otros casos, las confusiones pueden ser fatales para los partidos que se juegan el registro porque ahora ya no podrán beneficiarse de un reparto porcentual de los sufragios obtenidos por una coalición; tendrán que ganarse sus propios puntos. Aunque de la misma forma los grandes pueden pagar las consecuencias.
AL MARGEN
UN PUNTO más a favor de la movilización juvenil, un actor que no estaba previsto en la estrategia de los partidos, por lo menos no como surgió: el segundo y último debate entre los cuatro aspirantes a la Presidencia será prácticamente en cadena nacional de radio y televisión. El 10 de junio, contrariamente a lo sucedido a principios de mayo, habrá una mayor difusión del foro al que acudirán Enrique Peña Nieto, Andrés Manuel López Obrador, Josefina Vázquez Mota y Gabriel Quadri.
El llamado debate será precisamente el día en que se cumplen 41 años del llamado Jueves de Corpus, la matanza de estudiantes en el Casco de Santo Tomás, en la Ciudad de México. (
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