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Home Escala Crítica Tabasco: una histórica confrontación política; necesaria renovación de la clase en el poder

Tabasco: una histórica confrontación política; necesaria renovación de la clase en el poder

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 Escala Crítica/ Diario Presente

 
Víctor M. Sámano Labastida
 
Mucho se habla de la unidad en Tabasco pero la confrontación de grupos tiene raíces históricas. No es, como algunos insistían a finales de los noventa y en la primera década de este siglo, un choque provocado por el movimiento opositor iniciado por Andrés Manuel López Obrador. Para combatirlo afirmaban que Tabasco no progresaba por la división político-partidista. El PRI fue durante más de medio siglo el partido único dominante y eso no se reflejó en el desarrollo, salvo temporadas con gobernadores visionarios.
Recientemente el investigador y profesor universitario Raymundo Vázquez Soberano disertó una conferencia en relación al periodismo en la entidad, teniendo como eje un medio impreso: El Radical, órgano del Partido Radical Tabasqueño (1917-1919). Y es precisamente en las publicaciones de la época postrevolucionaria donde se reflejan las posiciones confrontadas de las diversas facciones que disputaron el poder. Con sus matices, podemos observar que es una contienda inacabada, algunas veces manifestada con violencia.
El doctor Vázquez Soberano se refirió cómo, entre 1914 y 1919, más de treinta publicaciones fueron auspiciadas unas por los partidarios de Luis Felipe Domínguez, del Partido Liberal Constitucionalista, y con presencia en la zona de Los Ríos,  y otras por los seguidores de Carlos Greene Ramírez, del Partido Radical Tabasqueño, cuya influencia se manifestaba en La Chontalpa. En no pocas ocasiones, mencionó el historiador, estos grupos pasaron a la agresión física. 
Fue una extensa charla, como parte de las actividades de celebración del 65 aniversario de PRESENTE, pero también por la necesidad de ofrecer un contexto de las épocas que ha vivido Tabasco. 
Así son las aportaciones que en esta serie de conferencias nos han dado Jorge Priego Martínez, Geney Torruco Sarabia, los participantes en el Laboratorio de Teatro Campesino e Indígena durante el gobierno de Enrique González Pedrero, y muchos más como cronistas y escritores desde los foros culturales y en las páginas del periódico fundado por Jorge F. Calles Broca.
 
RUTA Y FRONTERA
Agradezco, entre muchas otras reflexiones, la expuesta por Jorge Luis Capdepont Ballina, moderador de la plática de Vázquez Soberano, quien certeramente señaló que “Diario Presente es un puente entre los académicos y la sociedad”. También, he de señalar, que este matutino busca mantenerse como un puente entre los más diversos lectores. 
En estos diálogos participó ya la excelente periodista investigadora Marcela Turatti y el viernes lo hizo el ampliamente reconocido periodista Alejandro Almazán. Ambos abordan circunstancias de la actualidad mexicana que por razones varias atraviesan la historia de Tabasco: los migrantes y desaparecidos (estamos en la ruta de quienes buscan llegar a Estados Unidos), y el gobierno de la capital del país (en el que López Obrador y el movimiento fundado en 1988 han sido factor determinante). En su momento también el historiador y filósofo Ismael Carvallo abordará el vínculo entre el proceso nacional, Tabasco y el liderazgo obradorista.
Sin duda que la condición fronteriza de esta franja del sureste le confiere un carácter estratégico. Además, claro, de las reservas de hidrocarburos y de otros recursos.
A propósito de la entidad y del país, todo indica que estamos en una etapa de necesaria renovación de la clase política que se ha mantenido en el poder en los últimos 30 años, aunque esta renovación no será de golpe. Se trata de una lenta transformación que tiene su más notoria expresión en la Ciudad de México, donde la izquierda o lo que se conoce como tal ha venido ganando las elecciones desde el primer proceso democrático en 1997 y que de alguna manera fue preludio de lo que sucedió en 2018 con la prácticamente desaparición del partido único.
Hay quienes sostienen que el PRI como partido único dio paso a Morena, pero podemos advertir que Morena no será –no puede serlo- el nuevo partido casi único: es un movimiento cuyas corrientes y liderazgos muy variados se sostienen unidos por la fuerza de liderazgo de López Obrador, pero que pasando las elecciones del 2024 y en cuanto el INE convoque a la formación de nuevos partidos en 2025 seguramente habrá varias organizaciones que solicitarán registro, otros institutos existentes se fusionarán y algunos de los existentes posiblemente no logren el porcentaje para mantener su registro. 
¿Cuánto durará la transición y qué resistencias se encontrarán? Es parte de la incertidumbre, pero sin duda que en el caso de Tabasco necesita una renovación en el modelo de hacer política si en realidad hay voluntad y decisión para desarrollar al estado y romper el círculo vicioso de abundante riqueza y creciente pobreza.
Pero también la historia ha mostrado que las sociedades cambian porque hay un proyecto, o simplemente por necesidad de sobrevivir. 
 
 

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