Escala Crítica/Columna diaria
*Un sistema de 38 millones para prevenir a la población
*Cinco centros regionales de protección, 188 millones
*Los riesgos por lluvias torrenciales, el eterno retorno
Víctor M. Sámano Labastida
FUE UNA LLUVIA atípica. Nos sorprendió. Se adelantó la temporada. Todo funcionó bien, pero no fue suficiente. Tabasco tiene el mejor sistema de prevención. Somos ejemplo en el mundo. Etcétera. Podríamos hacer una colección de frases relacionadas con desastres mayores o menores, con visiones optimistas o pesimistas de ayer y de hoy. En Tabasco seguirá lloviendo con intensidad; habrá cambios extremosos del clima. ¿Debemos resignarnos o reasignarnos otra actitud?
Dijo César Burelo, director de Protección Civil a propósito de las primeras inundaciones de este año en Villahermosa entre domingo y lunes: “El agua se dio en un lapso de dos horas, avanzó muy rápido y rebasó la capacidad de los cárcamos. Fueron alrededor de ocho colonias afectadas”.
Comentó el secretario del Ayuntamiento de Centro, Juan Antonio Ferrer: “pensaron que las lluvias iniciarán el 13 de junio, no el 13 de mayo como sucedió adelantándose a los pronósticos”.
¿Realmente fallaron los pronósticos?, ¿fue un fenómeno “atípico”?, ¿funcionaron los sistemas de alertamiento?
Puede ser que desde un punto de vista –como dijo- un funcionario, sea más el escándalo que el daño. Para quien pierde una mínima parte de su patrimonio o ve afectada su seguridad la perspectiva es distinta. Estamos a tiempo para desmontar mitos y hacer las cosas como se deben. Hay prevenciones urgentes y la gestión de riesgo a mediano y largo plazos.
“Fue sólo una lluviecita”, escucho. Quien no atiende lo menos será rebasado por lo más.
EL GOLPE DE LLUVIA AVISA
UN REPORTE difundido el domingo 12 de mayo por la mañana indicaba: “El frente frío número 44 se traslada hacia el norte de Veracruz y se internará hasta Zacatecas, reporta el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
“Este sistema se asocia con una corriente en chorro y continuará desplazándose hacia el sureste, mantendrá nublados con lluvias fuertes a muy fuertes (…) Se registrarán nublados con lluvias fuertes a muy fuertes en Chiapas, Tabasco y sur de Veracruz…” (Fuente: Noticieros Televisa | 2013-05-12)
Esto lo debieron monitorear por lo menos los especialistas y los encargados de los sistemas de “alerta temprana”.
DEL PAPEL AL AGUA
SEGÚN LA ONU los sistemas de de alerta temprana “es una de las respuestas más efectivas para reducir la vulnerabilidad humana al cambio ambiental…”
“La alerta temprana es la identificación y evaluación oportuna del surgimiento de nuevas amenazas ambientales que en el largo plazo pueden afectar negativamente la vulnerabilidad de las personas, de los ecosistemas y de los servicios que estos proporcionan”. (PNUMA)
El uno de septiembre de 2009 se reportó que en el Diario Oficial de la Federación dieron a conocer dos convenios firmados por el gobierno de Felipe Calderón –a través de la Secretaría de Gobernación- y la administración de Andrés Granier. Autorizaban recursos por más de 38 millones de pesos para instalar un Sistema de Alerta Temprana y para la actualización del Atlas Estatal de Riesgo.
El primero tendría un “techo financiero” de 47 millones 636 mil pesos y el Atlas un costo de 7 millones 800 mil pesos.
Conforme a lo estipulado el Sistema de Alerta Temprana, Fase 1, permitiría disponer de un radar climatológico para medir las condiciones atmosféricas, identificando fenómenos meteorológicos y su magnitud. Un pronóstico adecuado de lluvias y huracanes.
El objetivo monitorear las amenazas y definir mecanismos para avisar a la población, prever necesidades y movilizar recursos. También -indicaba el acuerdo-, llevaría a promover la participación de la población en actitudes y prácticas de prevención.
A principios del 2011 el entonces director de Protección Civil, Roberto López Romero, anunció que en septiembre comenzaría a operar el Sistema de Alerta. Es un “sistema su géneris en todo el país”, lo máximo.
Dijo que tendría un radar, 14 estaciones hidrometeorológicas automáticas, un mareógrafo y una estación de radio sondeo completa. Enviaría información meteorológica en tiempo real. El costo del sistema: 37 millones de pesos.
El uno de agosto de 2011 el entonces gobernador Andrés Granier presentó un denominado ‘Plan Maestro de Protección Civil de Tabasco’. Dijo que los habitantes de Tabasco no tendrían que preocuparse más por sus vidas y patrimonio ante los posibles “desastres naturales”. Fue un acto de esos en los que acuden funcionarios federales –estuvo Laura Gurza de Protección Civil- y representantes internacionales -Magdy Martínez-Solimán de la ONU. Ahí estaban enviados de los gobiernos de Campeche, Coahuila, Chiapas, Guanajuato y Veracruz.
La lista de las acciones que –se dijo- salvarían a los tabasqueños de las catastróficas consecuencias de un desastre es larga: programas de Desarrollo Urbano; Reubicación de Viviendas; construcción de cinco Centros Regionales de Protección Civil; Sistema de Alerta Temprana y el Atlas Estatal de Riesgos, entre muchos.
Los cinco centros regionales de protección tuvieron un costo de 188.89 millones de pesos.
Claro, no faltaron los elogios del representante de la ONU Martínez Solimán.
Pero…
Algo no está funcionando, o todo quedó en el papel.
HACER LO QUE YA ESTABA
EL 14 DE ENERO de este año, durante su visita a Tabasco el presidente Enrique Peña Nieto puso en marcha el Programa Nacional de Prevención contra Contingencias Hidráulicas. Dijo que la Conagua contaba con mil 400 millones de pesos para terminar la infraestructura hidráulica y el desarrollo de nuevos proyectos. Ordenó que la dirección nacional de Protección Civil se coordine con el Sistema Meteorológico Nacional para contar con sistemas eficaces de alertas tempranas.
En noviembre de 2011 la Coparmex –sindicato patronal- informó que activaría un sistema de alerta temprana por Internet para orientar a sus agremiados.
En julio de 2012 el Consejo Coordinador Empresarial anunció su propio esquema de alerta de fenómenos meteorológicos con apoyo de sus pares en los estados del sureste. Este sector tenía detectadas 400 empresas en áreas inundables.
La basura en los drenajes y las calles es otro tema. Aunque no menor. Hace falta involucrar a la población en labores integrales de prevención. Hace falta una contraloría social para evitar anuncios espectaculares de obras y acciones de gobierno que sólo encontramos en las hemerotecas. (
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