Escala Crítica/Columna diaria
*Ex candidato en Chiapas encargado del relevo tricolor
*Concluye mandato de Francisco Herrera; 18 aspirantes
*Quedan menos de dos años para próximas elecciones
Víctor M. Sámano Labastida
EL EX CANDIDATO a gobernador de Chiapas en el 2006, José Antonio Aguilar Bodegas relevó en la dirigencia del PRI en Tabasco a Francisco Herrera León, ex aspirante a candidato a gobernador en el 2012. Concluido el periodo para el cual Herrera León fue nombrado sustituto –iniciado por Adrián Hernández Balboa y continuado por Miguel Romero-, no hubo acuerdo para realizar la elección de presidente estatal tricolor en los tiempos reglamentarios. Además, las recientes elecciones estatales interfirieron en ese proceso.
El chiapaneco Aguilar Bodegas será el encargado de organizar la elección de un PRI por primera vez en la oposición. Podría decirse que los priístas chiapanecos tienen experiencia en remar contra la corriente desde el año 2000 y hasta el 2012, tiempo en que una coalición encabezada por el PRD gobernó aquella entidad.
Actualmente en Tabasco por lo menos unas 18 personas aspiran a encabezar al tricolor tabasqueño. Como le decía en otra ocasión, es posible que terminen haciendo dos o tres bloques y de entre todos esos aspirantes salgan las fórmulas para presidente y secretario. No hace mucho, el propio Herrera León reconoció que los militantes de su partido estaban “confundidos” ante la lucha interna por la dirigencia.
Aunque se podría pensar que un partido que “perdió casi todo” en Tabasco –gubernatura, mayoría en el Congreso y en las alcaldías, las diputaciones y senadurías de votación directa-, tendría pocos aspirantes a dirigirlo, dos son los factores que explican entre otros esta multiplicación de candidatos: recuperaron la Presidencia de la República y, por otra parte, la dirigencia estatal es el único cargo al que pueden aspirar por ahora.
Sin descontar, por supuesto, las delegaciones federales y otros cargos en ese orden de gobierno. Pero, la dirigencia es la única posición que está relativamente abierta a la competencia. Por lo menos esto es lo que creen y reclaman las diversas corrientes, grupos y personajes dentro del tricolor. Además de que quien asuma la presidencia de ese partido pretende ser factor de decisión en la selección de candidaturas para el 2015.
El cálculo es sencillo: como el PRI no tiene gobernador en Tabasco, el eje del poder pasará a la dirigencia estatal. Sin descontar, por supuesto, el peso que puedan tener ciertas delegaciones que con vistas como superpoderes apoyados en la Presidencia de la República. Será interesante ver el juego de pesos y contrapesos en un partido que siempre tuvo un “jefe natural” que tomaba todas las decisiones o a quien se le consultaba invariablemente.
La alternancia, esto es la primera derrota estatal del PRI, modificó las fuerzas interpartidistas. Que ya habían sido tocadas en el reacomodo provocado por otras dos circunstancias: la ruptura de un ala pro izquierdista en 1988 y las aspiraciones presidenciales de Roberto Madrazo.
SOBRESALTOS RECIENTES
EN VARIOS TONOS y matices, los aspirantes a la dirigencia tricolor reconocen que se han encontrado una militancia y cuadros dirigentes desconcertados. En el doble sentido de sorpresa y falta de acción concertada. Perder el poder no es poca cosa. Tener el poder se vuelve una costumbre, a veces dañina.
El PRI que salió airoso de las recientes 14 elecciones estatales –aunque en medio de una serie de críticas y polémicas-, tiene que prepararse en el caso de Tabasco para los comicios del 2015 y para realizar una oposición efectiva y propositiva al gobierno de Arturo Núñez (Movimiento Progresista). Dentro de dos años tendrá que estar compitiendo por las presidencias municipales, por la mayoría del Congreso local y por la recuperación de las diputaciones federales.
Lo que parecía lejano se acerca. Pasó ya un año de las anteriores votaciones, primeras concurrentes en la historia reciente de Tabasco. En menos de año y medio los partidos –incluido el tricolor- estarán discutiendo el perfil de sus candidatos.
Por si fuere necesario agregar: quienes resulten de la selección del 2015 estarán perfilándose para el 2018. La máquina de la política es un aparato que no se detiene. Puede triturar a su paso.
La tarea de Aguilar Bodegas y del delegado del CEN del PRI, Raúl Pzos Lanz, senador de Campeche, va contra el tiempo: deberán organizar a unos 5 mil 700 votantes delegados, entre consejeros políticos municipales y estatales, y otros representantes con derecho a voto.
Las más recientes experiencias de votación interna del PRI tabasqueño y de designación de su dirigencia han sido polémicas: la llegada de Adrián Hernández Balboa en el 2009, quien pasó del gabinete de Andrés Granier al despacho tricolor, fue cuestionada por su falta de militancia; su relevo Miguel Romero, en mayo de 2011, tuvo que enfrentar un revés en los tribunales.
Finalmente, Francisco Herrera fue colocado en el cargo en marzo de 2012, en pleno proceso electoral y como resultado de una negociación de la candidatura al gobierno del estado.
La pregunta es obligada: ¿se debaten en el PRI tabasqueño proyectos institucionales, propuestas ideológicas y programáticas o sólo carreras personales e intereses grupales? Como sea: estar en la oposición enseña.
AL MARGEN
REACCIONES habrá sin duda a la aclaración del dirigente estatal del Morena, Javier May Rodríguez, en el sentido de que sólo dos diputadas (federales), María Fernanda Romero Lozano y Lorena Méndez Dennis, así como un funcionario estatal, Rodolfo Lara Lagunas, son los servidores públicos que aportan cuotas al movimiento lopezobradorista. “Son pocos los que ayudan”, apuntó.
Recientemente, el dirigente estatal del PRD, Roberto Romero, también aseguró que los militantes solaztequistas que tienen cargos públicos no aportan las cuotas partidistas. Con seguridad esto sucede también en otros institutos, contrariamente a cuando era obligado para un militante contribuir al sostenimiento de su partido. Los institutos políticos se sostienen del trabajo voluntario de sus bases.
PUNTUALIZÓ el gobierno estatal que hasta ayer carecía de evidencias respecto a los autores de los más recientes secuestros en la entidad. En estos casos, la prioridad es resguardar la integridad de los plagiados recientemente, entre ellos dos varones y una joven.
FUE UNA OPERACIÓN más de inteligencia, investigación y coordinación más que de fuerza, señaló el portavoz del Gabinete de Seguridad del gobierno federal en referencia a la captura de Miguel Ángel Treviño Morales y dos de sus presuntos cómplices. El gobierno ya había ofrecido cambiar la estrategia del combate a la delincuencia organizada. (
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